La vida de un joven de 17 años se esfumó el pasado martes en las aguas de un afluente de la vereda Caño Ñeque, corregimiento Ciénaga del Opón, en Barrancabermeja, Santander.
De acuerdo con testigos, el joven fue arrastrado por el caudal cuando estaba bañándose y de un momento a otro lo perdieron de vista. La comunidad de este sector rural dio aviso a los organismos de socorro para iniciar su búsqueda, la cual culminó el pasado miércoles con el hallazgo del cuerpo sin vida.
Ayer, en medio del dolor por la temprana partida del menor de edad, lo recordaban como un joven alegre y amoroso con su familia.
“Mi hijo estaba estudiando por ciclos, quería terminar pronto el bachillerato e irse a prestar servicio al Ejército. A él eso le gustaba mucho”, dijo la madre de la víctima.
El joven cursaba los grados 10 y 11 en modalidad de validación y era el mayor de dos hermanos. La familia busca ayudas para costear las honras fúnebres, cualquier apoyo pueden comunicarse al 312 4363689.
“Es una tristeza muy grande que él se haya ahogado, para la familia, especialmente para la mamá es un dolor incomprensible. Agradecemos al Cuerpo de Bomberos Voluntarios que estuvieron muy atentos en este duro momento para nosotros”, dijo Maryoris, presidenta de Junta de Acción Comunal de la vereda Caño Ñeque.