Una de las pruebas que les faltaban a los investigadores era el arma con la que fueron asesinados Óscar David Quintero de 23 años, y Álex Mauricio Almeida Reyes de 26, conocido como ‘Piraña’.
Mediante labores de acercamiento e inteligencia, el arma fue devuelta después que se extraviara cuando los compañeros de las dos víctimas agredieran al homicida.
Esta prueba se sumó para que un juez de garantías dictara medida de aseguramiento contra César Alberto Calderón Ravelo como responsable del doble homicidio de los hinchas del Atlético Nacional, el pasado 7 de mayo en el barrio La Castellana de Piedecuesta.
La Fiscalía además le imputó los cargos por los delitos de homicidio agravado y porte ilegal de armas de fuego.
La hipótesis del hecho sigue estando relacionada con un problema personal que el homicida tenía desde el mes de diciembre con una de las víctimas fatales. Mientras que el otro barrista habría sido asesinado por error.