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$10 millones por los bandidos que asesinaron a un vigilante durante un robo, en Santander

Las autoridades ofrecieron una recompensa de $10 millones para las personas que entreguen información que conduzca a la captura de los hombres que asesinaron a un vigilante durante un robo, en Santander.

Un total de $10 millones como recompensa entregan las autoridades del Magdalena Medio a las personas que ayuden con información que permita la captura de los tres responsables del homicidio de Henry Salazar, el vigilante asesinado de manera cruel en la estación de servicio La Bendición de Barrancabermeja.

Los ladrones y asesinos se llevaron el arma de dotación y cerca de $2 millones. La ciudadanía espera justicia.

Cerca de las 11:30 pm del pasado domingo Henry Salazar, un vigilante de 50 años, cumplía con su turno en la Estación de Servicio (EDS) La Bendecida, ubicada en la vereda Peroles, en el corregimiento la Fortuna de Barrancabermeja.

El hombre hacía menos de dos horas había iniciado sus labores; en ese momento dialogaba con el islero del establecimiento cuando ambos fueron sorprendidos por seis sujetos que arribaron de manera intempestiva en tres motocicletas a perpetrar un hurto.

El vigilante, al notar la llegada de los delincuentes, intentó agarrar su arma de dotación, pero la respuesta de uno de los malhechores fue inmediata y no le dio tiempo de reaccionar. El delincuente le disparó a sangre fría en reiteradas ocasiones, provocándole la muerte. Según el reporte de la Policía del Magdalena Medio, la víctima recibió dos impactos de bala en la región malar.

Mientras el cuerpo inerte de Henry permanecía en el suelo, tres de los delincuentes lo despojaron de su arma de dotación, mientras los otros amedrentaron al islero y le robaron el producido del día, “al otro trabajador le hurtaron aproximadamente un millón novecientos mil pesos y luego los sujetos emprendieron la huida hacia el sector de Campo 23”, dijo el teniente coronel Santiago Garavito, subcomandante de la Policía del Magdalena Medio.


Henry llevaba casi toda su vida desempeñándose como vigilante y en la actualidad residía en el barrio Campestre de Barrancabermeja, “eso era lo que él amaba, su trabajo. El hacía turnos ahí en Peroles y en la bomba que queda en la Puerta del Once; ahí en ese sector llevaba cinco años. Él no tenía hijos pero de él dependía la mamá que ya es una adulta mayor”, dijo Deison Motta, familiar de la víctima.


Sus amigos lo recuerdan como un hombre honrado y dedicado a su trabajo, “yo trabajé varios años con él y Henry siempre fue un excelente ser humano, colaborador, respetuoso con los compañeros, estamos de verdad muy atónitos con la noticia”, dijo Andrea Borja, amiga de la víctima.


El crimen del vigilante quedó registrado en las cámaras de seguridad, por lo que las autoridades realizan el análisis de las mismas para identificar y ubicar a los responsables.
Entre tanto, la comunidad de la zona anunció que en próximos días realizarán una reunión, ante la preocupación que tienen por los hechos de violencia que se vienen registrando en ese sector.

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