El lamentable asesinato de Facundo Amado Amado, citando un libro de Gabriel García Márquez, era la ‘Crónica de una muerte anunciada’. Era un campesino de 59 años, víctima del desplazamiento y quien en la actualidad laboraba como maestro de construcción.
Cuando amanecía el lunes festivo, en el asentamiento humano ‘La Gracia de Dios’ al norte de Bucaramanga, cerca al barrio Colorados, un disparo en la región de la clavícula izquierda fue la causa de su deceso.
Quien lo asesinó fue Abel Gil Gutiérrez, un hombre de 53 años que perteneció al bloque Magdalena Medio de las Farc bajo el seudónimo de ‘Julián Guevara’. Nació en San Pablo, sur de Bolívar. Hace siete años se había reincorporado a la sociedad civil y era firmante de ‘Los Acuerdos de Paz’.
El problema inició cuando Facundo madrugó a cortar unos árboles que presuntamente estaban en la propiedad del excombatiente. Esto no le gustó a Abel y fue hasta la casa a reclamarle. Como testigo estaba un líder del asentamiento.
El firmante de paz sacó una pistola y le disparó. La víctima fue auxiliada por el líder del asentamiento y al ser llevada al Hospital Local del Norte, falleció.
Abel Gil se escondió en su residencia, pero cuando los policías del cuadrante llegaron al lugar, decidió entregarse y en la actualidad está a disposición de la Fiscalía.
Además el arma con la que disparó pertenece a la Unidad Nacional de Protección, UNP, y estaba asignada a uno de los dos escoltas con los que contaba.
Ya había amenazas de muerte
La víctima de este caso de intolerancia social, Facundo Amado, pertenecía al partido Comunes, antiguo partido de las Farc. En junio de 2022, esta militancia había denunciado amenazas por parte del exguerrillero.
“De manera reiterativa el señor Abel Gil venía hostigando y maltratando física y verbalmente al compañero Facundo. Desde la dirección departamental del partido Comunes Santander, se le hizo acompañamiento e instauraron de las respectivas denuncias ante la Fiscalía General de la Nación, Defensoría del Pueblo e igualmente se le pidió medida de protección a la Unidad Nacional de Protección, UNP, sin que a la fecha se le hubiese garantizado la salvaguarda ni de su integridad física, menos de su vida. Rechazamos rotundamente el vil asesinato del compañero Facundo Amado y exigimos a las autoridades competentes garanticen se haga justicia y se tengan en cuenta las múltiples denuncias que en su momento se instauraron”, señaló un comunicado.
Ademas, en el escrito el partido Comunes agregó que, “Abel Gil Gutiérrez no ha sido reconocido por nuestra organización política, ni ostenta la condición de militante de Comunes, por ende, no ha estado avalado para ningún cargo de representación, vocería, ni circunscripción en las próximas elecciones”.
Se espera el resultado de las audiencias para conocer si a Abel Gil se le concede alguna medida de aseguramiento por ser el presunto responsable del hecho de intolerancia social.
