El desconsuelo se ha apoderado del municipio de Puerto Wilches tras confirmarse la muerte violenta de Álvaro Cortés Suárez, un hombre de 67 años quien era dueño de una volqueta con la que transportaba y extraía arena del río Magdalena, pero además propietario de un reconocido negocio abierto al público en esta población del Magdalena Medio santandereano.
De acuerdo con el relato de sus familiares, que fueron testigos presenciales de su lamentable asesinato, a la medianoche del viernes un sujeto llegó preguntado por el adulto mayor en su vivienda en el barrio San Rafael, en el caso urbano de la población, donde además funciona su negocio, un lavadero y estadero de nombre ‘Cañaveral’.
A esa hora aún estaba abierto al público, por lo que para el asesino le fue fácil ingresar al local y buscar a su víctima.
Quienes fueron testigos de los hechos aseguraron que se identificó como miembro de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia o Clan del Golfo y que iba por el pago de una cuota.
“Mi papá nos había manifestado que desde hace un mes le pedían dinero a través de llamadas telefónicas para dejarlo ejercer sus labores o de lo contrario no le permitirían seguir con sus negocios. Pero no hizo mucho caso a esa amenaza, hasta esa noche”, expresó una hija.
El presunto miembros del ‘Clan de Golfo’ buscó directamente al adulto mayor y después de una discusión desenfundó un arma de fuego.
“No tuvimos tiempo de reaccionar, no sabíamos que el tipo ese estaba armado y nunca pensamos que las amenazas fueran a llegar hasta ese punto de atentar contra la vida de don Álvaro, todos los que lo conocíamos, sabíamos que él no se metía en problemas”, señaló una de las personas que estaba en el inmueble.
El agresor accionó un revolver y le propinó cuatro impactos: en la cabeza, en el abdomen, la espalda y la pierna derecha.
Sus allegados aseguraron que al sujeto no lo habían visto en la zona, solo lo vieron esa noche.
Cometido el ataque y huyó del lugar. Los seres queridos remitieron al comerciante agonizante al Hospital de Puerto Wilches donde el personal de paramédicos lo intentó estabilizar. Por la gravedad de las lesiones fue remitido a Bucaramanga donde falleció cuando era transportado en una ambulancia hasta el Hospital Universitario de Santander.
“Era muy gentil, a todo el mundo ayudaba. Con sus negocios le daba trabajo a cuatro personas, ojalá se dé con el responsable de este asesinato. Un dolor que no podemos superar”, expresó una hija.
De igual manera sus amigos y paisanos expresaron que, “aunque no nació en Wilches, tenía muchos años de estar aquí. Muy buena persona, lamentable que esto pase en nuestro pueblo y más con una persona que era muy amable”.
El coronel Luis Cubillos, comandante de la Policía del Magdalena Medio, señaló que se maneja como hipótesis del homicidio una discusión motivada por el no pago de una extorsión.
“Sabemos que hubo una discusión inicial. Tenemos identificado al victimario que cometió este hecho. Pero el lamentable suceso es un llamado a las personas para que denuncien ante las autoridades cualquier tipo de extorsión de las que sean víctimas, por medio de la línea 123 o al 165 del Gaula”, indicó.
