Pero un paso en falso lo hizo tropezar y cayó contra la verja de una vivienda. El impacto que recibió en la cabeza lo dejó inconsciente de inmediato.
El propietario de la residencia, atónito por lo sucedido, refugió al joven y dio aviso a las autoridades.
Carlos fue trasladado al Hospital Universitario de Santander, HUS, donde intentaron salvarle la vida, pero en medio una intervención quirúrgica tuvo complicaciones. Coágulos de sangre en su cabeza -producto del trauma craneoencefálico severo que sufrió- no le dieron oportunidad.
¿Cómo ocurrió?
El domingo hacia la 1:30 madrugada Lizarazo se andaba por las calles del barrio Santa Ana, en Floridablanca, donde residía. Estaba consumiendo bebidas embriagantes cuando un ‘parche’ llegó a suscitar una riña.
No solo lo amedrentaron, fueron más allá: Le asestaron una cuchillada en un brazo y eso provocó en Carlos la reacción. Salió huyendo.
La persona que lo auxilió les confirmó a las autoridades que presenció el momento en que Carlos cayó de su propia altura contra la verja de su casa.
Una ‘sentencia’ de muerte tenía a Carlos sumido en el temor. Le contó a su pareja sentimental que unos sujetos lo abordaron diciéndole que “se despidieran de él porque no lo iban a ver más”.
“No sabemos quien fue. Un tío que es como su papá está allá en el barrio preguntando si alguien vio algo o sabe algo”, contó una familiar del occiso.
Carlos trabajaba como ayudante de construcción en la Mesa de los Santos y era padre de una menor de 7 años.
Su familia manifiesta que no tienen cómo cubrir los gastos fúnebres de Carlos. Si alguien desea aportar algo, puede comunicarse al 3166061458.
