La mañana del viernes, en la calle 51 con carrera 23 del barrio Nuevo Sotomayor, la trágica muerte de un hombre de 62 años alteró la rutina de quienes salían a sus trabajos, realizaban las compras del desayuno o se dirigían a los colegios o universidades.
Un golpe seco en el andén, frente a un edificio de apartamentos, dejaba ver que una persona se había lanzado al vacío, hasta ese momento sin conocer las causas del por qué lo hizo.
De inmediato el celador del conjunto, transeúntes y quienes laboran en negocios de esa calle, corrieron a auxiliarlo y se acercaron al cuerpo con la esperanza que aún estuviera con signos vitales.
Nada pudieron hacer ya que el deceso fue fulminante por el fuerte impacto al caer desde el piso 18.
Solo quedó llamar a la Policía que minutos después arribó con la Unidad de Criminalística de la Sijin.
Curiosos se preguntaban quién era, por qué se había lanzado, qué problemas tenía y hasta se llegó a especular si fue un accidente y su caída fue por resbalar desde una ventana.
“No conocíamos al señor, pero después nos enteramos que en el apartamento vivían sus hijos. La Policía vino y habló con sus familiares. Es muy preocupante la situación de salud mental que afronta nuestra sociedad. Todos los días vemos que no sólo son jóvenes sino también adultos los que caen en depresión y los lleva a tomar estas fatales decisiones”, aseguró un vecino del sector.
Tras las investigaciones y entrevistas adelantadas por los uniformados se confirmó que la víctima respondía al nombre de Jairo Eduardo Suárez Otero, nacido en Málaga, Santander.
El hombre era pensionado de Ecopetrol y residía en Piedecuesta junto a su esposa.
El apartamento desde el cual tomó la decisión de acabar con su vida era propiedad de sus hijos.
Un lamentable hecho
De acuerdo con la información recopilada por la Policía, su esposa fue testigo presencial del suicidio.
Sobre las 7:42 de la mañana arribaron al apartamento y Jairo le manifestó estar cansado, que se iba a acostar, hasta ahí la mujer no sospechaba lo que planeaba el compañero de su vida.
Después, según el relato consignado en el informe policial, lo vio sentado en una ventana y él le dijo, “ya no aguantó más, estoy cansado”, se lanzó.
Buscar ayuda
Las autoridades de salud de Bucaramanga invitan a las personas que sientan que tienen problemas de depresión u otros asociados a la salud menta, pedir ayuda en las diferentes instituciones que brindan servicios especializados.
Son varias las entidades en la ciudad en las que se puede acudir de manera presencial o por una llamada telefónica, y recibir atención y apoyo psicosocial frente a las dificultades o problemas personales.