Como era costumbre en las mañanas, una mujer de 30 años, residentes en el barrio Altos de Colorados, envió a su hijo de 12 a traer los productos del almuerzo.
Cuando iba por la calle 57 con carrera 23 AN, un perro de raza pitbull se le abalanzó y lo mordió en la cabeza. Los colmillos le alcanzaron a perforar el cráneo por lo que fue remitido al Hospital Local del Norte y después al Hospital Universitario de Santander.
El menor está estable, pero permanece bajo observación tras la mordedura del animal de raza peligrosa. Según el parte médico, está con antibiótico y será llevado a cirugía.
De acuerdo con el dueño de la mascota, cuando abrió la puerta de la vivienda se le escapó el canino y no pudo sujetarlo para evitar el hecho.
“Cuando vimos es que el perro lo tenía de la cabeza, de inmediato llegó el dueño y lo amarró. La herida fue grave, pero pudo ser peor”, relató un vecino.
La mascota fue retenida por la Policía Ambiental y llevada a la Unidad de Bienestar Animal de Bucaramanga donde permanecerá 10 días bajo observación. No es reincidente, pero no contaba con los esquemas de vacunación recientes.
Su amo recibió un comparendo ya que este tipo de perros por ser de raza peligrosa deben contar con una póliza y en vía pública debe ser llevado con un bozal.
La directora de la Unida de Bienestar Animal, Alexandra Moncada, señaló que el perro tiene cuatro años de edad y por ahora se ha descartado que este contagiado con rabia.
“Vamos a analizar el comportamiento del animal para saber qué vamos a hacer. Estos caninos son de manejo especial por eso insistimos cumplir con las normas para su tenencia”, señaló.