Según la fuente, los equipos de rescate encontraron a las 12.17 hora local de hoy (04.17 hora GMT) el cuerpo del último trabajador que quedaba por recuperar, en una operación de emergencia en la que participan más de 2.400 efectivos de rescate y 200 vehículos.
El túnel, parte de una autopista de esa ciudad fronteriza con Macao, se inundó hacia las 03.30 horas locales del pasado 15 de julio (19.30, hora GMT del día anterior).
Según la agencia estatal de noticias Xinhua, que había informado del hallazgo de 13 cuerpos sin vida horas antes, “la estrechez del túnel y las complejas condiciones hidrológicas, geológicas y meteorológicas han complicado las labores de rescate”.
Las precipitaciones de los últimos días en la provincia de Henan, en el centro de China, han provocado ya 33 muertos y ocho desaparecidos, así como la evacuación de 376.000 residentes, según los cálculos de las autoridades provinciales.
Varias ciudades de Henan y también de Hebei, en el norte, sufrieron hoy intensas lluvias que llegaron hasta los 350 milímetros por metro cuadrado.
En Xinxiang, al norte de Zhengzhou (capital de Henan), algunas estaciones meteorológicas registraron precipitaciones de hasta 812 milímetros por metro cuadrado y ya se han contabilizado 470.000 damnificados de una población total de 5,8 millones.
Algunos afectados recurrieron a la red social Weibo para mostrar los estragos causados por el agua y hacer un llamamiento al Gobierno: “en el distrito de Fengquan llevamos un día y una noche inundados, las casas han quedado inhabitables, la gente se ha refugiado en los tejados y tememos que escaseen la comida y el agua, ¡pedimos la atención del Gobierno y asistencia!”, publicaba en la red social una usuaria localizada en Xinxiang.
Respuesta de las autoridades y la sociedad
Las autoridades movilizaron a más de 39.000 miembros de equipos de rescate y el presidente chino, Xi Jinping, ordenó la intervención del Ejército chino -que envió a más de 5.000 soldados y miembros de la Policía armada y del personal de emergencias- para asistir a una población que ha vivido momentos desesperados, varios de ellos capturados en vídeo y que circulan por las redes sociales chinas.