Buscando el llamado sueño americano, un migrante colombiano murió tras caer de uno de los muros fronterizos que divide California y México y que tiene una altura de 9 metros aproximadamente.
El colombiano, según testigos, intentó evitar su arresto por parte de las autoridades migratorias de Estados Unidos, por lo que se subió al muro, pero cuando estaba arriba resbaló y cayó al vacío.
Ocurrió en la mañana del pasado 8 de noviembre, pero solo hasta hace poco se conoció la noticia en tierra colombiana. Ese día, Guardia Nacional de California asignada a vigilar la frontera informó por radio que un grupo de extranjeros estaba escalando un primer muro fronterizo, a unos 400 metros al oeste del concurrido puerto de entrada de Otay Mesa (California).
De inmediato llegaron al sitio y los hallaron en esa acción. Tres personas lograron pasar el muro, otra se devolvió a tierra mexicana, pero el colombiano cayó por accidente.
También se conoció que, tras el accidente, los uniformados intentaron auxiliarlo, pero fue imposible porque cayó en un sitio al que no podían acceder sencillamente. Agonizó por unos minutos. Unos veinte minutos después bomberos lograron acceder a la zona del accidente y declararon muerto al migrante.
Ahora, defensores de los derechos humanos informaron que los migrantes están llegando en mayorías a las fronteras e intentando cruzar a como dé lugar, antes de que el ahora presidente electo Estados Unidos, Donald Trump, fortalezca la seguridad en dichos sitios.
Estados Unidos prometió expulsiones masivas de migrantes ilegales, esto relacionado con las políticas de Trump en ese aspecto.
En junio de este año, otro colombiano murió al llegar a la frontera. Se trató de Jeison Javier Rojas, de 37 años, y su muerte es muy extraña ya que, al parecer, se encontraba en manos de las autoridades que lo capturaron cuando cruzaba el muro.