Una batalla campal se vivió hoy en el Paralmento de Taiwán, luego de que legisladores se pelearan en medio de una agria disputa acerca de las reformas de la Cámara, pocos días antes de que el presidente electo Lai Ching-te tome posesión sin mayoría legislativa.
Los legisladores gritaron y se empujaron unos a otros, y algunos saltaron mesas y tiraron a sus colegas al suelo. Un parlamentario, en un esfuerzo por evitar que se aprobara el proyecto de ley, le arrebató a la fuerza los papeles de votación y salió corriendo.
El Kuomintang (KMT), principal partido de la oposición, tiene más escaños que el Partido Democrático Progresista (PDP), pero no los suficientes para formar una mayoría por sí solo, y ha estado trabajando con el pequeño Partido Popular de Taiwán (TPP) para sacar adelante sus propias propuestas.
La oposición quiere dar al Parlamento mayores poderes de control sobre el Gobierno, incluida una controvertida propuesta para penalizar a los funcionarios que se considere que hacen declaraciones falsas en el Parlamento.
El DPP afirma que el KMT y el TPP intentan imponer sus propuestas sin el proceso de consulta habitual, lo que califican de “abuso de poder inconstitucional”.