Después de que el cuerpo de la menor fuera encontrado en bolsas negras a un lado de la carretera Taxco-Cuernavaca, Doroteo Vázquez, secretario de Seguridad Ciudadana de Taxco, ha sido objeto de críticas por sus declaraciones que insinúan una “omisión de cuidados” por parte de la madre de Camila, quien afirmó que su hija había ido a jugar a casa de una conocida.
En una entrevista para ‘Foro TV’, Vázquez mencionó que “es importante señalar que no podemos hacer juicios, pero desde un punto de vista, existe una responsabilidad maternal y una omisión”. A pesar de su posterior disculpa pública, sus declaraciones han provocado un debate sobre la revictimización y la criminalización de las víctimas, especialmente en casos de violencia de género.
Activistas, políticos y personalidades públicas han condenado las declaraciones de Vázquez. La senadora Patricia Mercado, reconocida por su activismo feminista, criticó la postura del secretario, argumentando que la noción de “omisión de cuidados” se emplea para revictimizar y eludir la responsabilidad del Estado.
Leslie Jiménez de Impunidad Cero y Melissa Ayala del GIRE se unieron a las voces que exigen una investigación con enfoque de género y cuestionan la falta de sensibilidad de las autoridades.
“La falta de sensibilidad de las víctimas también abonan a la impunidad y la falta de acceso a la justicia de las víctimas”, comentó Jiménez en X. Mientras que Ayala escribió: “Neta, qué ser tan miserable el secretario de Seguridad de Taxco. De alguna forma siempre hayan cómo culpar a las madres”.
Por otro lado, la madre de Camila defendió su cuidado hacia su hija, resaltando la confianza depositada en personas que mostraron “otra cara”. La tragedia se vio agravada por el linchamiento de tres personas señaladas como responsables del crimen, uno de los cuales falleció. Doroteo Vázquez lamentó este hecho, asegurando que los elementos de seguridad intentaron resguardar la integridad de los presuntos responsables.
“No es mi culpa, yo siempre he cuidado a mi hija. Confíe en las personas equivocadas porque me dieron otra cara”, aseguró la madre de Camila, la pequeña de 8 años que fue secuestrada y asesinada en Taxco, Guerrero.
Este incidente ha reavivado la discusión sobre la violencia en México y la urgencia de que las autoridades la aborden con mayor sensibilidad y eficacia. Además, la colectiva 50+1 también condenó las declaraciones del secretario de Seguridad Ciudadana del municipio, Doroteo Eugenio Vázquez.
“Las integrantes de la Colectiva 50+1 Nacional vemos con profunda indignación las imágenes que muestran las redes sociales y la prensa nacional sobre lo que sucedió en Taxco, Guerrero, donde fue secuestrada y asesinada la pequeña Camila, de tan solo ocho años de edad, y sus presuntos victimarios fueron linchados causando la muerte de una de ellas”, señalaron.
Obispo de la diócesis Chilpancingo-Chilapa, otra voz de rechazo
A la creciente indignación y crítica por el manejo del caso de Camila Gómez Ortega en Taxco, Guerrero, se une la opinión del obispo de la diócesis Chilpancingo-Chilapa, José de Jesús González Hernández, quien ha destacado la indiferencia de las autoridades como un factor crítico en la tragedia que culminó con el secuestro y asesinato de la niña de ocho años, así como el posterior linchamiento de los presuntos responsables.
“Nosotros decimos que no sean indiferentes, estamos viendo el delito y no lo detenemos”, expresó González Hernández en una entrevista concedida a reporteros tras una misa en la catedral de Chilapa. La figura eclesiástica profundizó en la responsabilidad colectiva frente a los actos injustos, enfatizando que la inacción o el consentimiento ante el delito convierte a los testigos en cómplices de este.
El obispo lamentó la situación de violencia y la respuesta insuficiente de las autoridades frente al crimen: “Es como dice un pensamiento aquí en Chilapa, que si no puedes evadir un delito al estar presente con ellos, si lo consientes, también eres cómplice”.
