Jenny Carolina Martínez Bejarano, una mujer colombiana, de 36 años, fue trágicamente asesinada durante un tiroteo en un restaurante-bar en Watsonville, California, Estados Unidos. Llevaba dos años viviendo en San José, California, en donde se encontraba trabajando para construir mejores oportunidades económicas.
El 22 de noviembre perdió la vida, cuando un hombre, identificado como Sergio Ramos, de 47 años, abrió fuego en el establecimiento.
Sonia Bejarano, la madre de la mujer colombiana, relató en exclusiva a la Revista Semana que su hija le envíaba dinero constantemente, pues ese fue el objetivo con el que se fue para Estados Unidos.
“Se fue con el propósito de ayudar a su hija que está estudiando para ser auxiliar de vuelo. Todo lo hizo con un propósito, pero no entiendo por qué hay personas tan desalmadas que le quitaron la vida de esa manera a mi hija”, relató la madre a Semana.
Dos años en Estados Unidos
Jenny trabajó en un hotel y posteriormente en un bar-restaurante como mesera, donde acabaron con su vida mientras estaba en su turno de trabajo, alrededor de la 1 de la mañana. La madre, en una conversación con Semana, dijo que hablaba con ella todos los días. Estaba enterada de cómo iba el turno de trabajo y se aseguraba de darle su bendición cada día.
La madre también reiteró que Jenny estaba siempre al pendiente de sus dos hijas. Las veía por videollamadas frecuentemente.
Una despedida dolorosa
En la última conversación entre madres e hija se evidenció todo lo que narró Sonia Bejarano a Semana.
La madre le escribió: “Mi Dios me los bendiga y que les vaya muy bien, la quiero mucho”, a lo que Jenny respondió: “Bueno madrecita, amén, gracias, Dios me la bendiga madre. Yo la amo mucho madre”.
La madre expresó su deseo de que se le otorgue un permiso o visa de emergencia para poder traer los restos de su hija a Colombia. Hasta el momento no ha obtenido ninguna respuesta de las autoridades.
