Sebastián Villa, futbolista del Boca Juniors de Argentina, volvió a estar en líos judiciales por lo mismo: violencia de género. Recordemos que el deportista había sido denunciado por su expareja, Daniela Cortés, en el año 2020.
Esta vez el futbolista está siendo acusado por los delitos de abuso sexual, violencia de género y tentativa de homicidio. La denuncia se hizo pública en las últimas horas, pero los hechos se habrían perpetrado en junio del año pasado, según manifestó la denunciante.
La mujer asegura que tiene pruebas suficientes contra el futbolista colombiano, quien no solo abusó sexualmente de ella, sino que también la agredió físicamente. En la denuncia, la víctima relató la manera en la que fue golpeada y sobornada con dinero para comprar su silencio.
Hasta el momento se desconoce la identidad de la mujer, pero se conocieron apartes de la denuncia, la cual arranca así: “Lo he conocido a principios del año 2020, y a partir del día comenzamos a frecuentarnos con habitualidad, compartiendo distintas clases de situaciones, almuerzos, cenas, etcétera, lo que permitió que conozca a su entorno más íntimo, como lo son los familiares, amigos y compañeros de su club de fútbol”.
En el mismo relato, la mujer define a Villa como “una persona sumamente violenta y agresiva, pero siempre, -hasta el día del hecho denunciado-, solo había ejercido sobre mí violencia verbal”.
Los hechos se remontan a la noche del 21 de junio del año pasado, cuando la mujer asistió con el jugador del Boca a un asado con varios jugadores del mismo equipo. Dice que su agresor se encontraba en alto estado de alicoramiento y que comenzó a hacerle un show de celos porque, supuestamente, ella estaba “coqueteando” con otro jugador, por lo que salieron de la casa.
Llegaron a la vivienda de Villa en compañía de dos hombres que trabajan con él. La pareja ingresó a la habitación a dormir y afuera se quedaron los escoltas del futbolista.
“En ese momento le digo a Sebastián de ir a dormir y es ahí cuando comenzó lo que fue la peor situación de mi vida. Me empezó a hablar mal y a maltratar. Sebastián había tomado más de una botella de whisky. Él me estaba acariciando en la cara, cuando de repente se pone violento, me aprieta con fuerza la mandíbula y la nuca, me pega una cachetada y me dice ‘¿Te gustaron mis compañeros?’”, se lee en la denuncia.
Asustada, la mujer dice que no intentó huir porque tenía miedo, además el encargado de seguridad estaba afuera. “Él (un escolta) se ocupa de tapar absolutamente todas las acciones de Sebastián, y en quien yo en ese momento no confiaba. Entre lágrimas, producto del golpe, él comienza a acariciarme el pelo, me seca las lágrimas y me empieza a besar, pero acto seguido me aprieta devuelta la mandíbula con mucha fuerza -impidiéndome respirar por muchos segundos hasta que logré zafarme de esa situación-, y me muerde de manera violenta los labios. En esos momentos pensé que pretendía matarme”.
Tras lo ocurrido, la víctima sintió que la iban a matar, por lo que se levanta rápidamente e intenta salir del cuarto, pero él la detiene. “Comenzó a abusarme, propinándome algunos golpes, y tapándome la boca con su mano, momento en el cual yo le realice algunos rasguños producto de querer salir de esa situación. Como resultaba imposible, él decidió salir de la habitación, sin saber qué hizo cuando estuvo afuera de la misma”.
La mujer relata que no sabe cómo salió con vida de esta situación, pero en un momento pudo pedirle ayuda a una amiga, quien es la que acude a rescatarla.
“Entre desconfianza por lo que yo podría llegar a contarle a mi amiga, se puso violento nuevamente, pero ahí solo desde lo verbal, por lo que comencé a buscar la forma de retirarme, pero lejos de querer hacer lo que yo quería, me empezó a decir ‘Quédate, todo va a estar bien, te amo’ y a la vez me tenía agarrada ‘tipo llave’ manifestándome ‘¿Solamente la puede tocar Cardona?’. Cuando ve que me voy a ir dice finalmente ‘Andate, decile a Cardona que te busque’”, relató la víctima ante las autoridades.
La víctima salió directo a un centro asistencial y los días posteriores tuvo comunicación con su agresor. “Sebastián me comenzó a decir que con cuánta plata se resuelve y le explicaba que no se resolvía con plata, que yo no necesitaba plata”, sentenció la mujer. Y agregó: “De un momento para el otro lo comencé a grabar, y le reiteraba que no quería el dinero explicándole que necesitaba saber por qué hizo eso. La suma que me ofreció fue de 5.000 dólares”.
“Posteriormente, me llama Félix y me decía que tenía algo para mí. Nos vimos en un bar y es ahí que me junto con él, quien agarra mi celular y me borra toda la información. Por suerte yo le había reenviado todo a mi amiga y a mi hermano. Aprovechándose de que yo estaba llorando, de forma violenta me obliga a firmar un papel y me entrega un sobre que tenía plata y me decía ‘Todo esto es tu culpa’, que ‘Ahora Sebastián se va a ir del país’ y que ‘Él igual va a ser millonario’. Y me decía que nunca me va a perdonar, ello para hacerme sentir culpable en caso de denunciarlo”, continuó detallando la víctima y aclaró que le devolvió el dinero a Félix.
Tras la denuncia, la mujer pidió protección, pues teme por su integridad y lo que pueda ocurrirle a raíz de sus declaraciones en contra del futbolista colombiano.