El Real Madrid encara uno de los grandes desafíos de su temporada, el reencuentro con un rival al que nunca derrotó en la Liga de Campeones, el vigente campeón de Europa, un Chelsea con inestabilidad institucional tras la espantada del ruso Roman Abramovich, que mide las opciones de presente del club con más títulos en la competición que anhela volver a reinar.
El compromiso se jugará en Stamford Bridge, a partir de las 2:00 de la tarde.
El regreso a Stamford Bridge, donde el curso pasado sintió el Real Madrid de Zinedine Zidane en semifinales que tenía un techo insuperable en ‘Champions’ hasta la llegada de un jugador diferencial como Kylian Mbappé, le llega en un momento de irregularidad. El equipo de Carlo Ancelotti (la presencia del técnico es duda hasta el último instante, aún positivo en coronavirus) se ha ido alejando del buen fútbol según se han ido rebajando sus fuerzas.
La ausencia de rotaciones, una plantilla reducida a 16 jugadores de confianza para el entrenador, tiene el riesgo de desplome en el momento que se deciden los títulos grandes. No peligra la Liga, por el colchón de puntos de meses atrás, y en la Liga de Campeones es el momento de demostrar. Estuvo ante las cuerdas en octavos, superado por el PSG en gran parte de la eliminatoria, hasta que reapareció ese adn especial del campeón en armonía con su afición que impulsó otra remontada para la historia.
Ahí radica la esperanza en el madridismo. En el interruptor que se activa en una competición especial en la que el Real Madrid nunca es buen rival. Pese a que las estadísticas digan lo contrario. El Chelsea como equipo ante el que más se enfrentó sin derrotarlo nunca. Hasta cinco enfrentamientos (tres derrotas y dos empates). Inglaterra, país en el que no gana desde su exhibición en Anfield hace siete años (dos derrotas y tres empates en sus cinco últimas visitas).
Todo se mira con otros ojos cuando está Karim Benzema. El gran referente necesita más de sus compañeros de tridente. Vinícius instalado en un bajón evidente, Rodrygo y Marco Asensio intercalando titularidades sin gol. El Real Madrid encontró buenos resultados cuando apostó por jugar al contragolpe pero el aviso del Parque de los Príncipes, donde no chutó a puerta, provocó que Ancelotti renunciara al bloque bajo. La opción de fortalecer con un cuarto centrocampista la medular, daría entrada a Fede Valverde.
El batacazo del clásico está olvidado. Ya está de vuelta Ferland Mendy en el lateral izquierdo y Benzema en punta. En su temporada más goleadora en la Liga de Campeones, con ocho goles que han ayudado a que en abril haya ya igualado su mejor curso goleador con 34 dianas. Llega lanzado. Seis partidos consecutivos marcando. Hasta diez goles. El autor del triplete que eliminó al PSG y devolvió las esperanzas al madridismo.
No hay más dudas que despejar en el once de Ancelotti que salva partidos por la fiabilidad de Thibaut Courtois en portería, devolverá a Dani Carvajal a la titularidad tras una inesperada suplencia en Balaídos y que mantiene a su intocable centro del campo con Casemiro, Toni Kroos y Luka Modric. De su partido, del momento físico y la brillantez con balón, dependerá buena parte del resultado.
El Chelsea había esquivado toda la inestabilidad que llegaba desde los despachos en el campo. Desde el día que Roman Abramovich anunció que vendía el club, había ganado seis partidos seguidos. Con la máxima de «estar juntos y ser fuertes», el equipo anotaba en el césped todos los triunfos que perdía en la política.
El desmoronamiento institucional no era distracción para unos futbolistas que incluso crecieron con esto. Caso de Kai Havertz, que le ha quitado la titularidad a Romelu Lukaku y ha marcado cuatro goles en sus últimos seis partidos con los ‘Blues’. Es la gran amenaza de un equipo que ha sufrido para encontrar un ‘nueve’ y que ahora lo tiene. Thomas Tuchel, además, no está para experimentos después del cataclismo ante el Brentford.
El técnico germano se excusó en el parón por selecciones para hacer cambios, dejar a un lado a la defensa de cinco y en el banquillo a Mateo Kovacic y lo pagó. El Brentford desarmó su defensa como pocos han hecho. Su segunda peor goleada como técnico del Chelsea y antes de la eliminatoria por la que pasa el futuro europeo del equipo.
Contra el Madrid volverá a los cinco atrás, entregará el medio a Kovacic y a Jorginho, aunque siempre con la posibilidad de que entre Kanté, y sacrificará al errático Timo Werner por un tridente conformado por Mason Mount, Kai Havertz y la zurda de Hakim Ziyech. Todo lo que sea salirse de eso, será una sorpresa y puede que un riesgo.
A diferencia del sábado, el equipo contará con un Stamford Bridge lleno, ya que el permiso del Gobierno británico les permite vender todo para los encuentros de Champions League. Un pequeño empujón para un Chelsea que ya eliminó en este escenario y sin público al Madrid la temporada pasada. Pero, por aquella época, nadie se esperaba el drama que viviría el Chelsea.
Alineaciones posibles:
Chelsea: Mendy; Alonso, Azpilicueta, Rudiger, Silva, James; Jorginho o Kanté, Kovacic; Mount, Ziyech y Havertz.
Real Madrid: Courtois; Carvajal, Alaba, Militao, Mendy; Casemiro, Kroos, Modric; Rodrygo, Vinícius y Benzema.