Muchas veces se ha dicho que después del primero todos son perdedores; no obstante, esta frase no le cabe a Ruitoque Fútbol Club que, aunque no ganó el Campeonato Nacional Interclubes Sub-13, dejó una magnífica imagen y sus jugadores y cuerpo técnico son unos ganadores.
Los dos partidos de esta fase terminaron igualados 0-0, tanto en Palmira como en Bucaramanga y, en la definición desde el punto penalti, la efectividad estuvo del lado vallecaucano.
Fue una llave muy disputada, con dos escuadras que intentaron imponer condiciones, pero prevaleció el orden táctico.
De esta manera, el conjunto santandereano finalizó invicto la campaña, con 23 victorias y cinco empates, en 28 encuentros disputados, en donde además registró 122 goles a favor y únicamente 10 en contra.
El club orientado por José de Jesús Suárez mostró grandes argumentos, entre ellos el orden táctico, la seguridad defensiva y la calidad a la hora de pasar al ataque.
Además, los buenos resultados de hoy no llegaron por casualidad, ni de la noche a la mañana.
Este grupo de futbolistas lleva un largo proceso, de alrededor de cinco años, que se evidencia en el campo de juego.
Esta camada de futbolistas, que se caracteriza por el buen pie, se conoce a la perfección y ha coleccionado un gran número de trofeos, entre ellos el Mundialito Incomesa, la Copa Yogurcito, el Torneo Interbarrios Q’hubo y los Campeonatos Municipales de la Liga Santandereana de Fútbol.
El cuerpo técnico, los padres de familia y los directivos del club también tienen mucho que ver en los buenos resultados, gracias a su constante apoyo para brindar las garantías suficientes a un selecto plantel de jugadores que tuvo una alta exigencia a lo largo de la temporada, con diferentes torneos y, además, alternando las labores académicas.