El crimen ocurrió el 17 de diciembre de 2020 en zona despoblada del municipio de Rionegro. Según los dictámenes periciales, el cuerpo de la niña presentaba golpes en el rostro y la cabeza.
De acuerdo con información de la Fiscalía, el hombre de 35 años de edad, en el momento de los hechos afirmó que él había sido víctima de una sustancia que le hizo perder la conciencia, y que su hija había sido raptada por desconocidos.
El sujeto es responsable del delito de homicidio agravado pero la decisión de primera instancia fue apelada ante la Sala Penal del Tribunal Superior de Antioquia por la defensa del condenado.