La Procuraduría General de la Nación abrió indagación preliminar a los miembros, aún por determinar, de la Policía Metropolitana de Santa Marta que participaron en el procedimiento de captura, custodia y conducción del empresario Enrique Vives, acusado de atropellar a un grupo de siete jóvenes, mientras conducía en estado de embriaguez, en la madrugada del pasado 13 de septiembre.
Familiares de las víctimas han denunciado que a Vives se le permitió ser recluido en una clínica, a pesar de que fue capturado en flagrancia, y posteriormente se permitió su traslado a una clínica de reposo, a pesar de que ya estaba bajo la custodia de las autoridades y el juez del caso había ordenado no trasladarlo.
La Procuraduría ordenó la práctica de pruebas para determinar la identidad de los presuntos responsables y establecer las circunstancias de tiempo, modo y lugar en que se realizó el procedimiento.
Una de las pruebas será la visita del ente de control a la Fiscalía de Conocimiento de Santa Marta y a la Policía Metropolitana, para obtener información sobre el accidente de tránsito.