Según lo expuesto por la Fiscalía en las audiencias, la mujer fue hallada por su padre, desmayada sobre la cama, junto al cuerpo de la niña. De acuerdo con el dictamen de Medicina Legal, la menor tenía varias cortadas en el cuello y en las manos.
En la vivienda, al lado de la presunta implicada, las autoridades encontraron dos botellas que al parecer contenían veneno e insecticida, respectivamente, y que supuestamente ella ingirió.
El juez séptimo de control de garantías acogió la petición de la Fiscalía e impuso medida de aseguramiento intramuros contra la procesada, por su presunta responsabilidad en el delito de homicidio agravado.
La defensa apeló la legalización de captura al igual que la medida de aseguramiento intramuros.