“Se llevaron la vida de un gran amigo, de un excelente padre, pero no vamos a hacer señalamientos porque Dios nos da paz, pero sí dejemos nosotros una buena huella para que un futuro se piensen las cosas mejor. Gracias por ser solidarios con la pérdida de Jorge. Es doloroso perder a un ser querido de esta manera”.
Con esas palabras, los familiares y allegados de Jorge Eliécer Castillo Berdugo, manifestaron, por medio de una velatón, su dolor tras su asesinato y pidieron a las autoridades celeridad en la investigación, aunque saben que nada les devolverá al hombre, de 51 años, y residente en el barrio Los Cerezos.
A Jorge Eliécer le propinaron un balazo en la cabeza, en la noche de Halloween, en una calle ubicada justo al frente del centro comercial La Castellana (barrio La Castellana), donde había parqueado su carro luego de estar en dicho centro comercial departiendo con su compañera sentimental.
Luego de caminar varios metros y llegar al carro, contó a este medio su hermana que, a Castillo le sonó su celular. Aunque su pareja le dijo que mejor no lo sacara, él intentó responder la llamada, “quizás porque de pronto vio que lo estaba llamando un docente que él transportaba”, precisó la pariente.
Justo en ese momento, 8:45 de la noche, varios motociclistas rodearon a Jorge Eliécer. “Mi hermano no hizo nada. Los tipos solo lo rodearon con la intención de quitarle el celular y uno de ellos le disparó directo a la cabeza”, contó la allegada el pasado primero de noviembre.
La hermana de Castillo no sabe con exactitud cuántos motociclistas lo rodearon, solo tiene claro que justo en esos instantes pasaba por esa zona la Caravana de Motos que durante la noche de Halloween se tomó varias calles de Cartagena.
En la noche del reciente lunes festivo, los parientes de Jorge Eliécer encendieron velas blanca en el sitio donde una bala acabó con el padre de tres hijos. Hubo una pequeña celebración religiosa y, con camisetas y globos blancos, tanto la comunidad como los parientes pidieron mayor control por parte de las autoridades y que este caso no quede impune. Así se lo dijo a El Universal Caro Bossa Bustamante, miembro de la Junta de Acción Comunal del barrio La Castellana, y quien tomó la iniciativa para este emotivo acto.
Jorge Eliécer siempre trabajó como administrador naviero y portuario, y últimamente también estaba dedicado a laborar por contrato para transportar docentes y estudiantes de diferentes colegios en su auto particular. Con frecuencia parqueaba su carro en el sitio donde un hombre, usando un disfraz, lo baleó directo a la cabeza.
Allí el lunes encendieron velas, oraron y pusieron una foto de Jorge, pidiendo al cielo paz y tranquilidad para su alma y protección para sus seres amados. “Tenía muchos sueños y muchos proyectos para el otro año. Era un hombre correcto, que no se metía con nadie”, enfatizó la hermana de la víctima.
El secretario del Interior y Convivencia Ciudadana del Distrito, Bruno Hernández, aseguró en medio del balance operativo de la noche del 31 de octubre, que por orden precisa del alcalde Dumek Turbay Paz están trabajando en la identificación de los organizadores y promotores de la caravana de motocicletas que recorrió diferentes sectores de la ciudad.