Enfermero, docente, preparador físico, escolta, jugador de rugby pero, ante todo, un héroe. Sus compañeros del Caniba Rugby Club dicen que él era un “de todito” y por eso lo apodaban ‘el Comando’. Y quizás por su personalidad, aseguran sus compañeros, Nelson Antonio Sinning Vélez salió en busca de justicia y de los sujetos que presuntamente pretendieron raptar a su hijastra el pasado 13 de octubre entre los barrios La Providencia y El Recreo.
Fabián Figueroa Castro, presidente Ad honoren del equipo Caniba Rugby Club, amigo y compañero de Nelson, dijo en medio del dolor que lo embarga que perdieron a un gran líder, un maravilloso ser humano, un padre ejemplar pero también a un hombre era un bromista consumado y muy alegre.
Figueroa, amigo personal de Nelson, dijo que a ‘el Comando’ siempre se le veía feliz y sonriente, y precisó que últimamente parecía un “loquito” porque hace apenas unos 36 días le nació su primer hijo y eso le había cambiado la vida, porque su gran deseo era tener una familia.
Sinning Vélez, de 33 años y oriundo de Mompox, estaba internado en una clínica de la ciudad, en una Unidad de Cuidados Intensivos, bajo pronóstico reservado, tras recibir golpes severos, principalmente en la cabeza, en un choque de motos en el que se vio involucrado al perseguir a los sujetos que intentaron llevarse a la fuerza a la adolescente.
El jugador de rugby falleció en la tarde de este sábado 19 de octubre. “Con profunda tristeza les informamos que el deportista Nelson Sinning Vélez falleció. Acompañamos en este momento tan difícil a sus hermanos de Caniba Rugby Club y a sus familiares. Extendemos nuestras más sinceras condolencias. Su legado y pasión por el rugby vivirán en nuestros corazones. ¡Descansa en paz, Nelson!”.
Así fue el intento de rapto y el accidente
El presunto rapto a la hijastra de Nelson ocurrió a eso de las 3:30 del domingo 13 de octubre cuando la adolescente, de 16 años y estudiante del colegio Inem, regresaba a su casa. Así lo contó su amigo Fabián Figueroa.
