Los habitantes del corregimiento de El Plateado, en la zona rural del municipio de Argelia, Cauca, vivieron una noche de terror por los intensos y prologados combates que se registraron en las últimas horas entre grupos armados al margen de la ley.
Aunque hasta el momento ninguna autoridad se ha pronunciado frente al tema, en las redes sociales los habitantes de este poblado denunciaron cómo más de 20 viviendas terminaron averiadas por los disparos y explosiones.
«Una larga noche de miedo, zozobra, terror vivimos los habitantes de acá del corregimiento, cuando estos señores de los grupos armados se encontraron en todo el casco urbano, iniciándose los combates en las horas de la noche de este sábado 31 de agosto y extendiéndose hasta la madrugada de este domingo 1 de septiembre», relató un comerciante de la zona.
Al parecer, y de acuerdo con el relato de la comunidad, integrantes de la Segunda Marquetalia llegaron hasta esta localidad para expulsar a los disidentes del frente Carlos Patiño de las Farc, formándose las confrontaciones, a pesar de que la zona está complemente militarizada.
«Estábamos en el parque anoche, sábado, cuando todo el mundo empezó a correr cuando sonó el primer rafagazo, claro ya tocó ir por el carro, montar a la familia y escondernos en la primera casa que encontramos en la huida», manifestó por su parte un líder social del lugar.
Muchos campesinos quedaron atrapados en medio de las explosiones y ametrallamientos, de ahí que se escondieron debajo de las camas, al lado de las neveras, estanterías o cualquier otro elemento que sirviera de trinchera, lo más inmediato era protegerse.
Después, en las primeras horas de este domingo, la gente comprobó como en las carreteras y caminos quedaron centenares de vainillas de fusil y espoletas, muestra de la magnitud de las confrontaciones.
«Bastante terror vivimos anoche porque eso no dio tiempo de nada, las balas pasaban sobre nuestras cabezas, veíamos que impactaban los televisores, las estanterías, las camas y solos nos limitábamos a permanecer sobre el suelo, abrazos, orando a Dios que nos salvara», relató otro poblador de este corregimiento.
Después llegaron las detonaciones, porque los disidentes de las Farc, para no permitir la llegada de sus rivales, empezaron a lanzar explosivos desde drones, aumentando el miedo entre la población civil.
«Cuando empezaron las explosiones, la gente se vio obligada a salir de las casas para correr hacia la zona rural del pueblo para no quedar en medio de esas detonaciones, muchos hicieron esto en medio de las balaceras, las cuales se prolongaron hasta el amanecer, a la misma gente le tocó ver como salvar la vida de los niños y de los abuelos», narraron los pobladores, compartiendo vídeos donde se aprecia el daño a las viviendas.
