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Feminicidio de Natalia Vásquez: una mujer estaría involucrada en su asesinato

Natalia Vásquez Amaya había solicitado medidas de protección para salvaguardar su vida y la de su hijo, recibió asesoría a través de la línea ‘Una llamada de vida’.

Colombia aún estaba conmocionado por el feminicidio de Stefanny Barranco en el centro comercial Santafé, cuando el jueves 30 de mayo, alrededor de las 5:45 de la tarde, ocurrió otro trágico evento en Suba.

Fabián Riveros asesinó a Natalia Vásquez Amaya delante de toda su familia en una casa ubicada en la calle 127C No. 46-02, en el barrio Canódromo.

El Tiempo reveló que Natalia Vásquez Amaya había solicitado medidas de protección para salvaguardar su vida y la de su hijo, recibió asesoría a través de la línea ‘Una llamada de vida’.

Fue orientada a acudir a la Comisaría de Familia Suba, donde efectivamente le otorgaron protección y la enviaron a una casa refugio de la Secretaría de la Mujer. El Despacho de la Comisaría de Familia Suba 1 había adoptado medidas de protección a favor de Natalia el pasado martes 7 de mayo de 2024, debido a las constantes agresiones físicas y psicológicas que sufría.

El día del trágico suceso, Natalia decidió salir voluntariamente del refugio, avisando previamente al comisario de Suba. Su agresor, Fabián Riveros, con quien había tenido una relación y un hijo de tres años, la sorprendió en la residencia de Suba donde ella estaba con su hijo y algunos familiares. El feminicida, de 34 años, llegó armado con un cuchillo y un arma de fuego, y sus reclamos giraban en torno a la custodia del menor, un proceso que ya había ganado la víctima.

Una mujer estaría involucrada
Una hipótesis sugiere la posible complicidad de una mujer que habría tocado el timbre para hacer que Natalia saliera de la casa sin sospechar el peligro. Vecinos y cámaras de seguridad captaron la discusión y los intentos de la familia de Natalia por defenderla, resultando también heridos. Natalia, gravemente herida, se desplomó en la acera ante la mirada atónita de los residentes.

La víctima intentó escapar, pero un vigilante del barrio lo detuvo. Al no poder huir, Riveros regresó a la vivienda y se quitó la vida con un arma de fuego, sin importarle la presencia de su hijo en el lugar.

La policía llegó rápidamente al lugar de la tragedia gracias a la alerta de los residentes y la familia. Procedieron a acordonar el área, levantar los cuerpos y recoger pruebas y testimonios para determinar las circunstancias exactas del hecho.

A las 8:35 de la noche, el teniente coronel Óscar Edgardo Landazabal González, Comandante Operativo Seguridad Ciudadana Número 1, informó oficialmente que Natalia, de 31 años, había sido asesinada por su expareja.

“El hecho ocurrió en la localidad de Suba a eso de las 6 de la tarde, cuando el victimario llega a una residencia y ataca de manera intencional”.

Las autoridades confirmaron que los familiares de Natalia resultaron heridos al intentar defenderla y fueron trasladados a la clínica Reina Sofía.

El niño de tres años, hijo de la pareja, está siendo protegido por las autoridades. El Cuerpo Técnico de Investigación Criminal (CTI) realizó los actos urgentes, y las patrullas de Infancia y Adolescencia y la patrulla Púrpura están brindando acompañamiento a las familias en este momento de profundo dolor.

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