Pasaron siete meses para que la familia de Yefry Andrés Zabala Orozco nuevamente supiera sobre su paradero, sin embargo las noticias fueron desgarradoras. El joven, de 18 años, fue asesinado en extrañas circunstancias en el sur de Bolívar.
El crimen se registró el martes 21 de mayo en el municipio de Achí y el cuerpo fue trasladado a la morgue de Medicina Legal de Sincelejo, donde permaneció sin identificación hasta el pasado martes cuando los familiares recibieron la trágica noticia y tras acercarse a la entidad confirmaron que efectivamente era Yefry Andrés.
Wálter Zabala, padre del joven, comentó a un medio de esa población que su hijo fue asesinado a balazos el 21 de mayo, pero el cuerpo lo encontraron el viernes 24 de mayo en una zona pantanosa y solitaria. Le propinaron dos balazos.
“Estaba abandonado en un humedal y unas personas lo encontraron y llamaron a las autoridades. No tenía documentación en ese momento, por eso estaba en la morgue como N.N.”, agregó el padre del joven.
También relató que su hijo estaba desaparecido desde el pasado mes de octubre, cuando salió de su casa para hacer un mandado y nunca más volvió.
“Yo nunca averigüé la desaparición de mi hijo, él estuvo prestando el servicio militar, pero al mes me lo devolvieron porque se portó mal y por eso tuvo orden de captura. Él tenía que volver, pero no quiso. El 15 de octubre debía presentarse ante un juzgado para que hiciera sus declaraciones del por qué no volvió más al batallón de Caquetá, pero le dio miedo y mejor se fue”, expresó Walter.
