“Éramos nueve hermanos, todos muy unidos. Siempre trabajamos juntos, nos apoyamos en todo, pero ahora sólo quedamos ocho y es algo que no podemos dejar de lamentar y sufrir”.
De esta manera, Ariel narra el dolor que siente por la muerte de su hermano Wilman Pertuz Constante, en un terrible accidente de tránsito ocurrido en la mañana del miércoles 28 de febrero, en la vereda Aguas Prietas del municipio de Turbaco.
En medio de sus lágrimas, Ariel relató a este medio que Wilman ese día salió de su casa, en el barrio La Esperanza del municipio de Arjona, a eso de las 5:30 de la mañana, como era habitual.
A las 6 ya estaba en la empresa dónde laboraba desde hace algo más de 12 años como volquetero. Con esa labor sacaba adelante a sus seis hijos y por eso, siempre tenía la mejor disposición a la hora de emprender su jornada de trabajo.
“Es una empresa dedicaba a transportar material para la construcción, sobre todo de material pesado como arena, zahorra y piedras. Wilman conducía una volqueta y era experto en pasar por las carreteras de la zona, pero esa mañana todo fue diferente”, contó el pariente. Agregó que a las 9 a. m., Wilman ya había realizado un viaje de zahorra en el vehículo y se dirigía a llevar otro a Santa Rosa de Lima.
“Yo también trabajo en esa empresa desde hace mucho tiempo. Esa mañana nos encontramos en la vía, él iba con material en la camioneta y yo llevaba la mía para tanquearla con gasolina. Al rato unos compañeros me dijeron que mi hermano había tenido un accidente y nos fuimos de inmediato para el lugar. Lo que vi y viví en ese sitio fue algo que nunca podré olvida. Intenté sacar a mi hermano de entre las latas, pero no pude”, contó.
La muerte de Wilman, de 53 años, fue cruel. Según contó Ariel, el vehículo llevaba por lo menos unas 40 toneladas de zahorra y Pertuz Constante iba por la vía a alta velocidad. Tal parece que dos carros transitaban en ese momento por la carretera y Wilman los esquivó. Al parecer, la volqueta sufrió una falla mecánica por lo que se excedió en velocidad y provocó que se saliera de la vía y chocara contra un árbol enorme.
“Me contaron que la volqueta iba muy duro, cuando es así es muy difícil detenerla, sobre todo porque llevaba mucha zahorra. Mi hermano chocó contra un árbol muy grande y fue tan fuerte el impacto que partió el arbusto por la mitad”, recordó Ariel.
Se siente impotente porque no pudo hacer nada para salvar a Wilman. “Cuando llegué hice todo lo posible por sacarlo de entre las latas del carro, pero no se pudo, estaba aprisionado y muerto. Sólo hasta las 2 de la tarde lograron sacarlo. Necesitaron herramientas especiales para eso”, añadió.
La Policía de Carreteras atendió el caso y, actualmente se encuentra investigando cómo ocurrió el accidente y si hay más vehículos involucrados. El cuerpo de la víctima se encuentra en la morgue de Medicina Legal y pronto realizarán su sepelio en Arjona.