Después de transcurrir un día desde el asesinato del empresario Roberto Franco Charry en el Parque de la 93, una zona exclusiva de Bogotá, las autoridades están trabajando para desentrañar los detalles del ataque que ha causado conmoción en la capital, así como en el país.
Desde el principio, se ha presumido que Roberto Franco podría haber sido blanco debido a su trabajo realizando auditorías millonarias, lo que supuestamente le habría valido amenazas de muerte.
Aunque esta teoría es evaluada por los investigadores, aún se están recopilando pruebas para confirmar las motivaciones detrás del ataque.
Lo que sí se ha determinado es que los perpetradores estaban vigilando a Roberto Franco durante varios días antes del incidente y estaban al tanto de sus movimientos en el Parque de la 93, donde trabajaba como consultor desde 2017 para la empresa El Arrozal y CIA SCA.
Durante el ataque, uno de los sicarios esperó en un estacionamiento privado hasta que Franco llegó en su vehículo. En cuestión de segundos, disparó al empresario por la espalda antes de huir del lugar, desencadenando una balacera en el área entre los escoltas del empresario y los sicarios.
Así escapó el sicario
Un video crucial muestra a uno de los presuntos sicarios subiéndose como pasajero en una motocicleta, aparentemente su medio de escape.
Sin embargo, su intento de huida fue frustrado cuando un escolta disparó al vehículo, lo que provocó que no arrancara.
El sospechoso, entonces, habría intimidado a un motociclista al azar para poder fugarse de la escena del crimen.
La moto abandonada se encuentra bajo análisis por parte de las autoridades, mientras que el conductor de la moto está bajo custodia luego de ser herido por un escolta, al intentar escapar a pie.
La investigación sigue en curso para esclarecer completamente este crimen atroz.