La Presidencia está alistando un nuevo jugoso contrato por los servicios del reconocido coreógrafo Nerú Martínez, quien tiene una estrecha amistad con la primera dama, Verónica Alcocer. Según se detalló en Palacio, Martínez volverá a ser contratado para realizar actividades de salud mental y física.
Así lo detalló el Departamento Administrativo de la Presidencia (Dapre), que subió al Sistema Electrónico para la Contratación Pública (Secop) el plan de contratación del coreógrafo y en el documento se detalló que su remuneración sería de 88 millones de pesos en un año.
El contrato, que se encuentra en proceso de evaluación, tendrá vigencia hasta el 27 de diciembre de 2024 y precisa que Martínez recibirá mensualmente 7,8 millones de pesos a cambio de realizar “actividades en materia de salud mental y física, que contribuyan al mejoramiento del clima laboral”.
Además, en el contrato se detalla que el coreógrafo desempeñará sus funciones especialmente en la ciudad de Bogotá, pero también estará disponible para desplazarse a otros territorios “cuando las circunstancias lo requieran”.
Este no es el primer contrato que recibe Martínez por desempeñar este tipo de labor en Palacio y desde la Presidencia se aclaró que es un técnico profesional en fisioterapia que tiene el perfil idóneo para asumir el contrato por cuenta del año de experiencia en proyectos en actividades artísticas, culturales, deportivos que promueven la integración.
Incluso el exdirector del Dapre y ahora ministro de las TIC, Mauricio Lizcano, defendió en 2022 –ante le polémica que se generó– el contrato por 27 millones de pesos que firmó ese año este reconocido coreógrafo para realizar estas mismas actividades en la Presidencia.
“Se contrató a Nerú (Martínez) para dirigir el gimnasio y las actividades de bienestar del Dapre. Tiene toda la experiencia y la confianza para desarrollar el objeto del contrato”, informó Lizcano, en medio de las críticas por la cercanía entre el coreógrafo y la primera dama.
Y es que esta contratación le ha costado críticas al gobierno de Gustavo Petro no solo por el monto al que asciende, sino por la estrecha amistad con Alcocer y el polémico episodio en el que apareció haciéndole masajes a la primera dama en una playa.
Cuando Petro fue alcalde de la ciudad de Bogotá, el propio Martínez reconoció en una entrevista la estrecha amistad que ha mantenido con Alcocer y reveló que fue una persona determinante en su decisión de “dejar de ser homosexual”.
“Mi gran amiga, Verónica Alcocer, ha visto ese cambio, lo palpó, porque la conozco hace años. Vio mi transformación total y ella fue una de las que más quedó impactada con esto y dice que los milagros existen”, contó el coreógrafo en el programa ‘En las mañanas con Uno’.
