Alexis Gómez Cardona, de 15 años, estaba feliz y enamorado de una chica que conoció en su colegio, en Medellín. Con frecuencia iba a visitarla a su casa, en el barrio El Salado, y salían a un local a comprar un helado o alguna comida rápida.
El pasado 4 de junio el menor salió de su vivienda, en la comuna 13 con destino a la casa de su novia, pero nunca más volvió al calor de su hogar. Su familia comenzó a buscarlo desesperadamente desde ese día. Con pancartas, mensajes por redes sociales y denuncias ante la Fiscalía intentaron hallarlo sano y salvo lo más pronto posible, pero no fue así.
Al menor lo encontraron muerto, con varias cuchilladas en el cuello, el 11 de junio en una zona apartada, cerca de su casa. Desde entonces los familiares comenzaron una lucha para exigir investigación y lograr que el caso no quede impune, es más, las autoridades ofrecieron 10 millones de pesos de recompensa al que diera información del responsable del crimen.
La Policía comenzó a realizar su trabajo y es así como apareció el primer sospechoso. Los allegados al menor aseguraron que un vecino, de 39 años, tenía una rara obsesión con el pequeño. Afirmaron que lo seguía y quería saber todo lo que el adolescente hacía.
A menos locales y nacionales, los padres y demás parientes de Alexis le pidieron a las autoridades capturar a dicho vecino pero, al parecer, las pruebas no son suficientes para detenerlo y habría que esperar una investigación de varias semanas.
Mientras ese proceso se realiza, los medios de Medellín publican otra muerte en ese mismo sector de la ciudad y, casualmente, se trata de una prima muy cercana de Alexis.
Manuela Ochoa, de 18 años, y quien lideraba las marchas y plantones para pedir justicia por el caso del adolescente, fue encontrada sin vida el pasado 20 de julio. La hallaron colgada de un árbol con una sábana, pero su familia no cree que se trate de un suicidio.
Para medios de esa región afirmaron que la muerte es confusa ya que la joven estuvo desaparecida por varias horas, además, les parece extraño que se suicidara en una zona enmontada y que ella poco transitaban. No descartan que sea represalia por liderar la búsqueda del menor.
Manuela habría sido la primera persona que señaló a dicho vecino como sospechoso del crimen de Alexis porque, días atrás, los vio discutiendo en una calle.
