Publicidad

Cuidado con fotos que bajan de páginas porno: están estafando desde las cárceles

Delincuentes usan perfiles falsos para atraer a los incautos y después les venden contenidos de internet. También extorsionan cuando captan datos personales de los que compran contenido.

Navegando por las redes sociales, las generales y las exclusivas para adultos, se encuentra un sinnúmero de ofertas de personas que venden su contenido sexual, la cual catalogan de exclusivo. Pero entre tanta oferta, desde las prisiones, los delincuentes aprovechan para poner sus modelos para captar incautos y quitarles su dinero, entregándoles contenido que encuentran en los múltiples portales de pornografía.

Así le sucedió a Carlos*, un comerciante que al verse seducido por las fotografías que vio de una atractiva mujer en las redes sociales, decidió visitar su perfil y en este encontró que promocionaba la venta de un contenido erótico, el cual podía negociar a través de WhatsApp.

“Cuando empecé a conversar con esta mujer, me dijo que me vendía un paquete de contenido a $30.000, lo que me pareció hasta económico. Hice la transferencia a una cuenta que me mandaron y cuando me enviaron el paquete de contenidos que había comprado, me encontré con una sorpresa: las fotos eran de otras mujeres, al igual que los videos”, relató.

Pero esto no paró ahí. En su intriga, este hombre decidió hacer la verificación a través de Google y se encontró con que tanto las fotos como los videos por los cuales pagó, los podía encontrar gratis en portales para adultos.

Rolando Plazas, representante legal de MRE Hunter, indicó que a través de las redes sociales que maneja le han llegado dos denuncias de este tipo, en las que hombres terminan siendo estafados en su apuro de satisfacer sus deseos sexuales a través de la compra de contenidos a través de WhatsApp, Telegram y hasta el mismo OnlyFans. Teme que la modalidad vaya aumentando con el paso del tiempo.

“Ellos hacen el lance con las fotografías y de $30.000 en $30.000, aprovechándose de los incautos, cuánta plata se hacen si logran coger 10 al día”, manifestó Plazas.

Sin embargo, el mayor Gabriel Niño, comandante del Gaula de la Policía Metropolitana, señaló que no tienen denuncias de estafa bajo la modalidad de la venta de contenido, ni tampoco consultas al respecto.

Presume que en los casos que se ha presentado, las víctimas optan por perder el dinero, al ser montos relativamente bajos, en lugar de interponer cualquier acción legal en contra de los responsables.

También extorsionan

La situación más delicada se presenta cuando esta comercialización de contenido sexual termina en una extorsión, situación de la que el Gaula sí tiene denuncias oficiales.

“Las víctimas ingresan a líneas donde venden contenido de carácter sexual, bien sea imágenes o videos, o para sostener encuentros. Con la línea telefónica, los delincuentes hacen una rápida ingeniería social y comienzan a extorsionarlo por adquirir estas imágenes, diciéndoles que si no pagan lo que ellos piden, los boletean en las redes sociales”, explicó el mayor Niño.

La modalidad de presión se fundamenta en tomar una fotografía de las redes sociales de la víctima y ponerles letreros catalogándolos de violadores, pedófilos y demás calificativos, al igual que ocurre con los implicados en los préstamos a través de aplicaciones.

Los montos de la extorsión son establecidos por los delincuentes y pueden empezar desde $1 millón y pueden llegar a los $30 millones, dependiendo del interés de los delincuentes.

De acuerdo con el Gaula de la Policía Metropolitana, este año se tienen 206 denuncias del delito de extorsión mediante sexting en todo el Valle de Aburrá, los cuales ya se están investigando.

Y esto ocurre en un boom que hay en las redes sociales del comercio de contenido sexual que, según cifras extraoficiales entregadas por expertos, puede dejar un movimiento económico de cerca de $2.500 millones, teniendo en cuenta que en Colombia se estima que hay unas 10.000 personas que tienen su sustento en la venta de los contenidos sexuales.

Por eso, el mayor Niño reiteran el llamado a evitar dejar información personal a la hora de comprar estos contenidos y en caso tal de hacerlo, hacer la denuncia a la línea 165 del Gaula para que se tengan lineamientos sobre cómo reaccionar.

Esta situación deja en evidencia la diversificación del mercado delincuencial desde las prisiones colombianas y la forma cómo se aprovechan de un mercado que toma cada vez más fuerza, puesto que le ponen toda un catálogo sexual en su celular, así algunos de estos terminen siendo toda una estafa.

Agregue a Q'hubo Bucaramanga a sus fuentes de información favoritas en Google Noticias aquí.
Publicidad

Otros artículos

Síguenos

0SeguidoresSeguir
4,304SeguidoresSeguir
6,840SuscriptoresSuscribirte
Publicidad

Últimos artículos

Publicidad
Publicidad