La mañana de este viernes se viralizó en redes sociales un cartel que daba cuenta de la desaparición de Yéssica Calvera Cortés, quien, de acuerdo con la información suministrada en redes, no daba señales desde las 6 de la mañana del mismo viernes.
Aunque parecía muy pronto para emitir una alerta de desaparición, pasadas apenas unas horas desde el último contacto, su familia supo que algo serio pasaba y decidió subir el cartel con la foto de Yéssica a redes sociales. La corazonada resultó ser cierta y horas después recibieron la peor de las noticias; Yéssica había sido hallada sin vida al interior de su vivienda. Su cuerpo tenía evidentes signos de violencia. Q’HUBO habló con Alexánder Godoy, esposo de la hoy fallecida, quien desde un aeropuerto en Estados Unidos nos dio pormenores de lo sucedido.
“No tenemos claridad de nada”
A pocas horas de que tomara el primer vuelo que encontró con destino a Bogotá, Alexánder Godoy nos narró las angustiosas horas que ha vivido desde que se enteró que Yéssica, su esposa, no aparecía: “Nosotros hablamos todas las mañanas, sin falta, pero la mañana de ayer fue la excepción. Mi hijo sale a estudiar muy temprano, entre 5:30 y 5:40 de la mañana. Cuando él salió, Yéssica se disponía a ducharse, fue la última vez que la vio con vida”, nos detalló Alexánder en la víspera de su vuelo de regreso a Colombia.
Pasó un rato y Yéssica seguía sin contestar. Para Alexánder, el momento en que supo que algo pasaba fue cuando se enteró que el celular de su esposa estaba apagado: “Cuando el teléfono ya no timbraba me asusté mucho y ahí empecé a llamar a familiares y allegados, pero nadie sabía. Evidentemente algo andaba mal y lo corroboré cuando me puse en contacto con sus compañeros de trabajo en Sony, ellos me dijeron que no había llegado ni avisado nada”, aseguró Alexánder con un dejo de tristeza y rabia en su voz.
Yéssica era profesional en producción audiovisual, trabajó durante varios años en el Canal RCN como colorista y actualmente, desde el mes de marzo, trabajaba para Sony Teleset.
Ella no era de las que faltaba al trabajo así como así y si por alguna razón faltaba, avisaba. Su trabajo era su responsabilidad más grande y siempre respondía, razón por la cual cuando su esposo supo que no había ido hizo una llamada que le daría un drástico giro a su vida y a la de su familia: “Llamé al colegio de mi hijo y le dije que se fuera para la casa (ubicada en el barrio Modelia, en Fontibón) cuanto antes para que revisara si algo andaba mal. Él salió de una y cuando llegó, como no tiene llaves, tuvo que meterse por la ventana y luego ya fue que la encontró muerta. La habían apuñalado, estaba en el baño y tenía heridas en el cuello, en el abdomen y en las manos”, puntualizó Alexánder a pocas horas de abordar el avión que lo traería al trágico encuentro con su familia.
Sin embargo, hay otra versión que sostiene que Yéssica sí alcanzó a salir de su casa y que incluso iba manejando su carro en la víspera de su crimen.
Para las autoridades el hecho podría responder a un posible caso de hurto dado que la escena del crimen estaba evidentemente desordenada, como si alguien hubiese entrado buscando algún elemento específico. No obstante, Alexánder nos confirmó que de acuerdo con las informaciones que había recibido al momento, aparentemente no se habían robado nada de la casa.
Para esclarecer los múltiples interrogantes que deja el hallazgo del cadáver de Yéssica, las autoridades se encuentran recopilando videos de cámaras de seguridad del sector para establecer a cabalidad lo sucedido. Hasta el momento se habla de un homicidio, pero no se descarta que se trate de un nuevo caso de feminicidio.