José Geovanny López llegó al hospital de Apicalá, Nuestra Señora Del Carmen, porque tenía un molesto dolor en un ojo. Esto habría sucedido, según versión de su esposa, Ana Guzmán, porque en su vista le cayó una basura que le había sido imposible retirar por sí mismo.
Guzmán, narró a un medio de Ibagué, cómo sucedieron los hechos y explica sus motivos para manifestar que los médicos fueron negligentes y que por su mal obrar dejaron morir a su esposo.
Su versión da a conocer, que el pasado viernes, López tenía molestias en uno de sus ojos por un mugre, sentía malestar y dolor, por lo que decidieron acudir al hospital donde le realizaron un lavado y posteriormente le aplicaron según cuenta la mujer, diclofenaco y dexametasona. Esta última como señala la denunciante, habría sido la encargada de provocar las demás complicaciones.
Así las cosas comentó que desde que le suministraron dicho medicamento, la salud de José empeoró notablemente. Al notar esto, los médicos optaron por trasladarlo de un lado a otro sin tener una respuesta, fue así que llagaron a una entidad de salud de Girardot.
«Llegamos a Girardot a la clínica donde nos lo reciben y lo ingresan por urgencias y allí nos dicen que tocaba llevarlo a reanimación con más de seis enfermeras y médicos quienes hicieron de todo para salvarlo, pero el médico nos dijo que mi esposo está muy grave y que lo habían enviado más muerto que vivo», indicó.
Finalmente, la mujer pide justicia, pues señala que desde que le aplicaron la inyección empezó la carrera de la muerte de este hombre.