En busca de su libertad, una multicolor guacamaya voló de su cautiverio y fue a parar en los alrededores de la Villa Olímpica de Bucaramanga, cerca de la Quinta Brigada del Ejército, tal vez con la esperanza de su rescate.
No fue un soldado el que encontró a la asustada ‘emplumada’, sino una noble transeúnte que quería entregársela a sus ilegales dueños (ninguna persona es propietaria de fauna silvestre), y no la podía llevar a su casa porque sería presa fácil para su gato.
Por eso la dejó al cuidado de una trabajadora de un local comercial de la zona, mientras encontraba a sus ‘dueños’, y publicó la foto de la guacamaya en las redes sociales. Enseguida, muchas personas respondieron que la compraban o que se las regalara. Pero la señora solo quería devolverla a sus ilegítimos ‘amos’.
Redes sociales ayudaron al rescate de la guacamaya
“Acá el tiempo de respuesta fue muy importante. Cuando conocimos que la información llegó a las redes sociales de inmediato acudimos a realizar todo el protocolo para su búsqueda y posterior liberación”, afirmó Diana Carolina Pérez Cortés, médica veterinaria del Centro de Atención y Valoración de Fauna Silvestre – CAV de la Corporación Autónoma Regional de la Meseta de Bucaramanga – CDMB, quien inmediatamente organizó el operativo para rescatar al ave.
“Conocí la noticia y enseguida contacté a la señora y le informé que debía entregar la guacamaya a la autoridad ambiental o a la Policía Ambiental, y no a otra persona. Le expliqué que la fauna silvestre es fundamental para el medio ambiente y por eso debemos cuidarla”, contó la médica veterinaria.
Y agregó: “la señora, un poco confundida, informó que la guacamaya la tenía una cajera de un local comercial y enseguida nos contactamos con ella. Llegamos al barrio Luz de Salvación, ubicado en el sector de Provenza de Bucaramanga, la rescatamos junto con la Policía Ambiental y la trasladamos al CAV de la CDMB, donde procedimos a su valoración”.
Tras la inspección médica, se encontró que la guacamaya presenta amputación de dos dedos y maltrato general por su cautiverio, por lo tanto, será sometida a un riguroso tratamiento médico y proceso de rehabilitación y readaptación, para su posterior liberación en su hábitat natural.
Animales silvestres no son mascotas
La funcionaria hizo un nuevo llamado a toda la ciudadanía a que entiendan que las especies de fauna silvestre no son animales domésticos y no son mascotas para exhibir, sino que son animales que deben estar en su hábitat natural y que nunca se deben sacar de ese entorno, donde cumplen una función esencial para el medio ambiente.
“Al extraer a estos animales de su entorno se causa un daño irreparable al ecosistema y a la especie como tal. Así mismo, existe el riesgo de que estas especies trasmitan virus, hongos y otros elementos patógenos que generen enfermedades a los humanos en las ciudades. La invitación es a que no capturen, no compren y no patrocinen el comercio de fauna silvestre, que se realiza por redes sociales, y que se viene acentuando con esta clase de prácticas en un mercado negro con nuestra fauna silvestre, además de ser algo ilegal”, aclaró la médica veterinaria.