En materia de convivencia y cultura ciudadana, uno de los mayores problemas que afectan a Bucaramanga es el manejo inadecuado e irresponsable de los residuos sólidos por parte de habitantes y comerciantes.
Esta es una situación que se agudiza con los días y que hasta la fecha no se ha podido contrarrestar de manera contundente, a pesar de la pedagogía y las campañas de sensibilización implementadas por la actual Administración Municipal.
Los bumangueses esperaban que con la aplicación del Código de Policía se pudiera hacer frente a esta situación, pero la realidad es otra.
El descaro de los irresponsables escaló a tal punto que en aceras de la capital santandereana los peatones se pueden encontrar con vísceras y restos de cárnicos esparcidos y expuestos a cielo abierto, lo que atrae la presencia de gallinazos.
Tal y como ocurre en el sector de Conucos. La comunidad denunció ante Vanguardia los desórdenes de residuos que se registran en uno de los andenes de la zona, al parecer causados por un comerciante.
“En la esquina de la carrera 33, frente a los colegios San Pedrito y La Merced, algún negocio de comidas bota sus residuos durante la noche”, precisó una de las quejas atendidas por este medio.
Mientras la Alcaldía de Bucaramanga reporta que entre enero y junio de 2022 se retiraron 407 toneladas de residuos en espacios públicos convertidos en basureros ilegales, la Policía notificó la aplicación de 37 multas contra ciudadanos sorprendidos mientras disponían desechos en sitios no autorizados y fuera de los horarios de recolección.
Las sanciones reportadas también se impusieron contra recicladores por desórdenes durante el ejercicio de sus actividades.
De hecho, desde marzo pasado el Comité Civil de Convivencia en Bucaramanga advirtió “la importancia de empezar a realizar ‘comparendos’ a ciudadanos que incumplan con la correcta disposición de residuos”.
Uno de los perjudicados es Jesús Rey Almeida, edil de la Comuna 4, quien manifestó que “iniciando 2022 Vanguardia nos ayudó para que las autoridades limpiaran el punto crítico del barrio Pío XII. La Alcaldía acudió y dejó aseado, pero debido a la falta de vigilancia y controles de la Policía, nuevamente esta zona verde se está llenado de basuras. ¿Qué pasó con la aplicación de los ‘comparendos? Los indisciplinados solo aprenden con sanciones”.
Tras comunicar las inquietudes de la comunidad, la Policía Metropolitana respondió que “se realizó una mesa de trabajo con la empresa prestadora del servicio de aseo, Emab. Se iniciarán planes de control, principalmente en aquellos sectores donde existen estos focos de contaminación, como alrededores de plazas de mercado y separadores viales. Estos operativos vamos a realizarlos en compañía de la Secretaría de Salud”.