En las afueras de los planteles con mayor presencia femenina, como el caso de la Escuela Normal Superior y La Merced, padres de familia han advertido la presencia de sujetos, quienes se ubican debajo de puentes y rampas con el único fin de lanzar miradas lascivas a las alumnas.
En la comunidad estudiantil se registra preocupación por posibles casos de ‘secuestro exprés’ y de agresión sexual contra menores de edad por parte de individuos que acechan en las afueras de colegios para cometer delitos, y sacar provecho de la vulnerabilidad que representan los menores de edad.
Con el regreso total de los menores a las aulas, en 2022 se dispararon los reportes y denuncias sobre acoso sexual, intimidación, drogadicción y hurto contra estudiantes, en cercanías de edificaciones que hacen parte del sistema educativo.
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Las estadísticas oficiales del Gobierno Local indican que en lo corrido del presente año, con corte al pasado 19 de abril, se han registrado 136 casos de hurto y acoso sexual contra ciudadanos entre los cinco años y los 19 años de edad.
De este total de víctimas 128 adolescentes y jóvenes sufrieron robos. Los otros ocho casos corresponden a infantes, menores de 15 años, que padecieron situaciones clasificadas por las autoridades como acoso sexual y actos sexuales violentos. De acuerdo con lo precisado, ninguna de estas situaciones escaló al acceso carnal, por fortuna.
Los más recientes indicadores de la Alcaldía de Bucaramanga detallan que, alrededor del 42% de estos robos y agresiones sexuales en 2022 se cometieron en vías públicas, cerca del 8% en corredores viales, 8% en callejones, 3% en el transporte público y otro 3% en parques. El porcentaje restante no fue precisado por el Municipio.
Esta falta de cifras, trazabilidad y análisis en detalle fue cuestionada la semana pasada por parte del Concejo. En estos momentos no se conoce con precisión las amenazas que enfrentan los estudiantes en las afueras de los colegios y el grado de riesgo al cual están sometidos.
Con el fin de diagnosticar y caracterizar tales peligros, en la ‘Ciudad Bonita’ se inició una investigación con apoyo de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, Unodc. Adicionalmente dicho estudio entregará un plan de acción para contrarrestar el actuar delictivo y garantizar la protección de los alumnos.
Potenciales abusadores
“En los costados del puente peatonal que conecta la sede de La Merced con el colegio San Pedrito, en la carrera 33, se hacen tipos en moto a ver bajo la falda de las estudiantes. Es preocupante que este tipo de comportamientos queden impunes. En zonas como esta, en donde existen varias sedes educativas en una cuadra a la redonda, debe haber más presencia de Policía”, narró una madre de familia.
Miembros de la Asociación de Padres de Familia de la Escuela Normal Superior también han denunciado ante Vanguardia que hay individuos merodeando en las afueras del colegio, y “con la excusa de hacer mototaxi se la pasan es ‘morboseando’ a las niñas en falda”.
Las alarmas están encendidas en las comunidades educativas. En pasados días, el Personero del Colegio Inem denunció ante el Concejo de Bucaramanga que “hay un caso de acoso sexual para prestarle mucha atención. En varias ocasiones he sido testigo de acecho y acoso contra una estudiante, por parte de sujetos en moto. La situación se volvió más grave. Hace días, temprano en la mañana, un tipo la persiguió en bicicleta y esta vez no solo fueron palabras, la agarró del brazo y comenzó a decirle cosas”.
Hurtos se agravan
En barrios como Santander, La Universidad, San Rafael, Provenza, entre otros, las mismas Juntas de Acción Comunal advierten que los delincuentes tienen de blanco a estudiantes de colegios.
“Ladrones en moto seguido roban alumnos del colegio Tecnológico, suceso casi siempre en las tardes, después de las 6:00 p.m. A veces se ve a la Policía, pero casi siempre a los muchachos les toca solos. Muchos alumnos tienen que esperar bus, porque no les pueden costear el transporte por falta de recursos. Son cientos de menores en riesgo. Deberían cuidarlos más”, manifestó un residente del barrio La Universidad.
En las denuncias atendidas por Vanguardia se conoció un caso de ‘secuestro exprés’, contra un estudiante del colegio Salesiano el mes pasado.
Según el relato del abuelo de la víctima, el menor fue abordado en las afueras del plantel por un sujeto que lo amenazó con un arma de fuego, “y se lo llevó. El ladrón lo condujo hasta el parque Centenario. Allá le robó todo lo que tenía. Le quitó el celular, el bolso y hasta los libros”.
Los padres temen que este tipo de situaciones puedan escalar a delitos como violaciones sexuales o extorsiones.
Expuestos a la drogadicción
Para Érika Maldonado, madre de una estudiante de sexto grado, el mayor riesgo que existe de camino al colegio “es la drogadicción. La niña hizo hasta quinto de primaria en el Rafael García Herreros (Norte de la ciudad), y la cambié de colegio para el bachillerato. Estaba expuesta a muchos consumidores de droga por el camino. En zonas verdes y en parques a plena luz del día se veían muchachos consumiendo y vendiendo drogas, y esos mismos son los que dañan a los niños que van creciendo.
“Después preferí pagarle a un señor para que la llevara al colegio, pero es otro gasto que suma. En el colegio que está ahora nos queda más cerca de la casa, y me queda tiempo para acompañarla a la entrada y esperarla a la salida”, agregó Maldonado.
Otro sector en donde preocupa la creciente venta y consumo de psicoactivos es la Calle de Los Estudiantes. En un operativo ejecutado el pasado lunes, 13 menores de edad fueron conducidos a comisarías de familia, luego de que las autoridades les hallaran alucinógenos y armas blancas en sus pertenencias.
Se inició una investigación
Luego de varios llamados realizados por comunidades educativas y líderes cívicos, el Gobierno de Bucaramanga contrató una investigación para determinar con exactitud los peligros a los que están expuestos los alumnos en entornos escolares.
El Municipio informó que “la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, en convenio con la Secretaría de Educación, presentó a rectores y estudiantes cinco herramientas de investigación para aplicar en las 47 instituciones educativas oficiales de Bucaramanga.
“Las cinco herramientas de la investigación buscan entornos escolares seguros. La estrategia recoge información importante de los entornos cercanos al colegio y los traduce en herramientas necesarias para crear ambientes seguros”, explicó la Administración a través de un comunicado.
En el presente mes se tienen programados talleres, grupos focales, entre otros ejercicios para el recaudo de información. Se espera que en julio próximo se presente un documento con el diagnóstico y las recomendaciones precisas para cada plantel o sector neurálgico de la capital santandereana.
Dato: en Bucaramanga se reportan 77.400 estudiantes matriculados en colegios públicos en 2022.
