Debido a las fuertes y recientes lluvias que han azotado al país, que causaron la creciente del río Magdalena, se ha visto innecesario el uso de atarrayas para capturar peces pues ellos saltan por sí solos a las pequeñas embarcaciones de los pescadores de la región.
Este espectáculo tiene lugar en Barrancabermeja y Puerto Wilches, Santander, Gamarra en Cesar, en El Banco, Magdalena, e incluso ha llegado hasta Barranquilla.
Así lo explica Ulfran Zambrano, líder de vendedores de pescados de Barrancabermeja, quien aclara que este hecho no se trata de la subienda de pescados sino del aumento de agua sobre el río que provoca la llegada de más peces a las aguas.
Esto representa una buena temporada para los pescadores artesanales del Magdalena Medio pues resultan con sus canoas repletas de estos animales, por lo que aumenta la oferta de bocachico, bagre, blanquillo, entre otros.
El vendedor dice que el bocachico es el que más se consigue en la región, y es posible adquirirlo desde mil pesos hasta $10 mil la unidad. La libra del bagre y el blanquillo bajó de nueve mil a siete mil, aproximadamente.
Zambrano agrega que el desbordamiento del río ha dado pie a la aparición de pescados en alcantarillados y calles de los municipios afectados por la temporada de lluvias.
En redes se dice que este video corresponde a la subienda, pero no es así, pues este fenómeno se da principalmente entre diciembre y febrero. Durante la subienda, grandes masas de pescados del río Magdalena emprenden viaje hacia la Costa Atlántica.
