En plenaria del pasado martes, el representante a la Cámara por el Partido Dignidad, Jorge Gómez, denunció públicamente una “jugadita” con la que la Presidencia de la Cámara de Representantes buscaría que Liliana Botero de Cote llegara a reemplazar a Edwin Ballesteros tras su renuncia en septiembre, aunque hay posibilidad de se aplique la silla vacía al Centro Democrático.
El congresista, miembro de la Comisión de Acreditación de Documentos de la Cámara de Representantes aseguró que, el pasado lunes, el secretario general de la corporación hizo llegar un oficio a la comisión, enviado por la presidenta de la Cámara, Jennifer Arias, para que se evaluara la viabilidad jurídica y la hoja de vida de quien podría ser el reemplazo en la curul de Edwin Ballesteros.
El excongresista santandereano es investigado por la Fiscalía por presuntos hechos de corrupción mientras fue gerente de la Empresa de Servicios Públicos de Santander, Esant, lo que lo llevó a renunciar a su curul.
“La presidenta (Jennifer Arias) trató de meternos un ‘gol’ en la Comisión de Acreditación Documental. Nos enviaron un oficio para que estudiáramos la viabilidad jurídica y aprobáramos la hoja de vida del reemplazo de Edwin Ballesteros”, aseguró Gómez.
La intención del oficio era que se evaluara la hoja de vida de Liliana Botero de Cote, posible reemplazo de Ballesteros.
“Invitación a prevaricato”
Como una “invitación al prevaricato” tildó Gómez el oficio que tiene como asunto remisión documentos para dictamen / Posesión del reemplazo del doctor Edwin Ballesteros.
En el documento de fecha del 25 de octubre, se lee que “en atención a las instrucciones impartidas por la presidencia de la Cámara de Representantes”, se remitió la información correspondiente para determinar la viabilidad jurídica de suplir la falta absoluta generada por la renuncia de Edwin Ballesteros.
Sin embargo, esta función sería de la Mesa Directiva de la Cámara de Representantes y no de la Comisión de Acreditación.
Consultada por Q’hubo, Jennifer Arias aseguró que el procedimiento que se ha dado es el adecuado, además de sostener que ha envido oficios a Botero de Cote en los que le ha notificado que aún se desconoce el futuro político de la curul.
El posible reemplazo
En los comicios legislativos de 2018, Liliana Botero de Cote alcanzó 17.672 votos, 138 tarjetones menos que Edwin Ballesteros.
Botero fue esposa del exalcalde de Barrancabermeja, Santander, Edgar Cote Gavino, quien falleció y es la siguiente en votación por el Centro Democrático.
Sin embargo, aún se desconoce la viabilidad jurídica de ser quien reemplace a Ballesteros, pues el Artículo 134, de la Constitución Política de Colombia consagra que cuando una persona tiene un cargo de elección popular y es vinculada formalmente a un proceso penal, el cargo no podrá ser reemplazado, en lo que se conoce como la aplicación de “la silla vacía”.
La Corte Suprema de Justicia vinculó a Ballesteros a una investigación por posibles hechos de corrupción mientras fue gerente de la Esant. Tras su renuncia al Congreso, el caso pasó a la Fiscalía.
Que el Centro Democrático pierda su curul, al igual que Santander, dependerá de que la Fiscalía inicie investigación contra Ballesteros, por los hechos de corrupción que hoy tienen a Richard Aguilar tras las rejas.