La propuesta la puso sobre la mesa el Concejal de Bucaramanga, Jaime Andrés Beltrán, quien señaló que “en la ciudad ya no hay autoridad”.
“En los últimos cuatro años la ciudad organizada y educada desapareció completamente. El avance de una ciudad culta tuvo un retroceso a una completamente desorientada, sin nivel de convivencia”, argumentó.
Además, manifestó que la accidentalidad en la ciudad ha incrementado en cerca del 43 % por no respetar las señales de tránsito.
“Este es el reflejo de una sociedad que va en retroceso. Se perdió la autoridad en la ciudad. Lo más preocupante es la cantidad de accidentes que se están generando y la falta de control por parte de nuestros gobernantes. La pregunta es ¿será que necesitamos volver a las fotomultas en semáforos para que los ciudadanos vuelvan a vivir en orden y en armonía?”, cuestionó el concejal.
Añadió que Bucaramanga ya agotó la etapa de la educación. Las campañas de concientización no son suficientes. Según enfatizó se necesita mano dura.
“En los últimos tres gobiernos se han invertido muchos millones intentando educar a la gente y nos hemos dado cuenta que hoy no es suficiente, se necesita autoridad”, dijo.
“O respeta las normas o se sanciona”
Sobre la propuesta de implementar las cámaras fotomultas en los semáforos para controlar las prácticas irresponsables de algunos motociclistas indicó que no se busca mirar a qué velocidad transitan los conductores, sino salvar una vida.
“Este no es un tema de retomar un negocio o un mal antecedente en la ciudad sino de salvar vidas. Una persona que no respeta las señales de tránsito está atentando contra la vida de los demás y debe ser sancionada. Al adulto hay que hacerle entender que respeta al otro o la misma ciudad lo castiga”, explicó.
Dijo además que la sanción no tiene que ser obligatoriamente económica, podría ser penal. Sin embargo, cuando el ciudadano se ve afectado de manera económica es cuando acata mejor la norma.
“No tienen sentido de pertenencia con la ciudad”
Sobre el panorama de descontrol vial, Beltrán explicó que obedece a dos factores: el avance de la informalidad en el transporte y que gran parte de los motociclistas que ejercen la ‘piratería’ no son bumangueses, por ende no tienen sentido de pertenencia con la ciudad.
“La gente empezó a probar cómo le iría siendo transportador informal al punto que se salió de control, muchos de ellos no quieren la ciudad y por eso no les importa incumplir las normas. La falta de autoridad llevó a que el bumangués se vuelva relajado y desplacen cada vez más al peatón”, expuso.
Agregó que aunque como concejales no pueden coadministrar la ciudad, sino hacer Control Político sobre la administración Municipal, quiere llevar la propuesta al Concejo de la ciudad y ponerla sobre la mesa en la Alcaldía, como una iniciativa que permita recobrar la autoridad y la movilidad de la capital santandereana.
“Este clamor no es de Jaime Andrés sino de la gente que lleva en Bucaramanga más de 30 años y están aterrados de ver en lo que se está convirtiendo la ciudad. Una medida que hace unos años veían como impopular hoy la consideran como una alternativa para retomar la autoridad y el control, porque buscan vivir y transitar por las calles de manera segura”, declaró.
¿Qué dicen los bumangueses?
Por redes sociales los ciudadanos respondieron a la propuesta del concejal. Estas son algunos de los comentarios:
