Se espera que el próximo 21 de julio, la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales, ANLA, realice un pronunciamiento ante las propuestas planteadas por la Administración Municipal. La decisión se le comunicará al Juzgado 15 Administrativo, en el marco del Plan de Cierre del lugar.
“Se quiere garantizar la disposición final en el marco de un cierre exitoso, cumpliendo con todos los requerimientos jurídicos. Las mesas técnicas permiten un acompañamiento, por parte de la ANLA y la Procuraduría Ambiental, en donde podamos establecer unos volúmenes adicionales, manejado de manera segura y responsable el cierre”, expresó Juan Carlos Cárdenas, alcalde de Bucaramanga.
Durante el proceso, se priorizará una serie de adecuaciones para responder correctamente con la estabilidad en la celda, el manejo de lixiviados y los olores. El compromiso y los aportes de los recursos debe ser de los 16 municipios que disponen en El Carrasco.
De esta forma, se pretende ampliar la capacidad en El Carrasco en cerca de 733 mil metros cúbicos.
“Acá lo más importante es la participación tanto de la Gobernación de Santander como los demás municipios que disponen residuos. Es un reto que se construye de manera colectiva”, agregó el mandatario.
Además, se avanza en la posibilidad de desarrollar en un predio ubicado en Lebrija, un nuevo sitio de disposición, identificado en un estudio realizado por la Universidad Industrial de Santander, UIS.