La comunidad del sector occidental de Bucaramanga denuncia la presencia de minería ilegal debajo del Viaducto de la Novena, una obra de infraestructura vital para la ciudad.
Según las denuncias, se han escuchado explosiones y se ha evidenciado la socavación de la montaña que sostiene el viaducto, poniendo en riesgo su estabilidad.
El edil de la Comuna 5 Larry Sánchez, quien ha hecho seguimiento a la situación, alertó sobre el peligro que representa la minería ilegal para el viaducto y la comunidad aledaña. “Las explosiones y la socavación están debilitando la montaña y podrían ocasionar un derrumbe”, señaló.
Los residentes del sector también han expresado su preocupación por la tala de árboles y la contaminación ambiental que genera la minería ilegal. “Esto no era así antes”, comentó un residente. “No había tanta destrucción”.
Las autoridades ambientales y la Policía Nacional han realizado operativos en la zona, pero la minería ilegal continúa. La comunidad exige medidas contundentes para frenar esta actividad y proteger el Viaducto de la Novena.
Las autoridades ambientales han sido notificadas, pero la comunidad insiste en que se tomen medidas más efectivas para controlar estas excavaciones sin control. La presencia de maquinaria especializada sugiere una alta inversión económica en estas actividades ilegales, por lo que es crucial que las autoridades investiguen y tomen medidas para proteger el viaducto y el entorno natural.
Mas denuncias
Esta semana Vanguardia también publicó un informe sobre cómo con dinamita y socavones en la escarpa occidental continúa la minería ilegal en Bucaramanga.
Esto confirma otras denuncias que se publicaron entre diciembre y febrero de este año, cuando esta redacción denunció la aparición de personas que se ubican en la parte baja de la escarpa occidental y extraen oro con químicos, erosionando la montaña y hasta usando maquinaria amarilla.
Los mineros ilegales usan agua a presión para que la escarpa ceda, la tierra y las piedras caigan al agua y estas personas puedan ‘barequear’ el sedimento y extraer piedras del metal precioso de manera artesanal.
Sin embargo, a esta peligrosa práctica se le sumó el uso de explosivos y el hallazgo de cuevas en lo profundo de la montaña. La grave denuncia la hizo en las últimas horas el alcalde de Bucaramanga, Jaime Andrés Beltrán.
El mandatario local dijo que durante los operativos para frenar esta práctica, se encontraron varios socavones de gran profundidad en la escarpa, que serían generados con el uso de explosivos.
“Los habitantes de la escarpa nos han reportado que escuchan explosiones durante las noches y las madrugadas. Cuando las autoridades realizan las verificaciones se encuentran con grandes huecos en la montaña”, explicó Beltrán Martínez.
