Esteban es el protagonista del cuento didáctico ‘Vamos a Colorear el Mundo’, creado por la Corporación para la Defensa de la Meseta de Bucaramanga, que educa ambientalmente a los niños a través del arte y la cultura.
A este niño le gusta el deporte y la naturaleza, es feliz, es tierno. Un día se dio cuenta que el mundo estaba perdiendo su color debido a la contaminación generada por los seres humanos.
En su recorrido, al cual lo acompaña su mascota y fiel compañero, el perro Max, Esteban se encuentra con Mágico, un colibrí ventricastaño del Cañón delChicamocha y Lluvia, una rana del Cerro de la Judía deFloridablanca, quienes le revelan que la fórmula para recuperar el color de las cosas es a través de las pequeñas prácticas ambientales.
Los niños que leen la cartilla tienen la posibilidad de aprender, entre otras, la adecuada disposición de residuos, la economía circular, los incendios forestales y la tala de árboles.
Este maravilloso personaje no sólo se encuentra en la cartilla sino que también es un personaje inflable con el que los niños pueden interactuar, es un niño que promueve la práctica del deporte, es un títere, es un amigo de los niños, personificado por un actor, que ha viajado por 13 municipios de Santander llevando su mensaje de preservación.
Esteban, un legado vivo
El personaje de esta historia está inspirado en un niño de la vida real. Se trata de EstebanDurán Monsalve, un niño santandereano, que a sus 15 años, en 2020, se adelantó en el camino y falleció tras un accidente.
“Esteban era un niño que brillaba como el sol, que con su mirada pintaba de colores el mundo. Nos dejó una huella de amor, de felicidad y alegría. Era un amante y defensor de los animales. En sus fotos se veía junto a varios animales, en especial deMax, su perro y compañero”, afirmó la jefe de la oficina deGestión Social y Ambiental de la Cdmb, Mónica Paola Monsalve.
La ingeniera Monsalve, además de ser la encargada de esta oficina en la Corporación ambiental, también tuvo el privilegio de ser la madre de Esteban, o ‘El Holandés’ como le gustaba que lo llamaran en sus competencias de BMX.
“Aunque la idea de que mi hijo fuera protagonista del cuento no fue mía, cuando leí la cartilla le encontré muchas similitudes con Esteban. Cuando me dijeron que se trataba de él me sentí muy orgullosa de que se le rindiera un homenaje tan bonito”, expresó la funcionaria.
Ayer sábado, cerca de 200 niños bicicrocistas adelantaron una válida de BMX en Cenfer, en el marco de la feria Bioexpo, para rendir homenaje a la memoria de este niño que trascendió con su legado a ser protagonista de su propia historia.
El alcance de la campaña ha sido tal que corporaciones ambientales de otros departamentos como Boyacá y Cesar solicitaron autorización para queEsteban se convierta en embajador de la educación ambiental en sus territorios.
De la vida a las letras
Yorley Gómez, comunicadora social de la oficina de Comunicaciones de la CDMB, fue la encargada de transformar la historia de Esteban Durán en protagonista del cuento interactivo.
Gómez afirmó que “fue un proceso de creación literaria que no fue fácil. Creo en el más allá y en algunos momentos le pedí ayuda a Esteban para continuar escribiendo la historia. Sentí su energía y sobretodo su amor”.
La comunicadora aseguró que “es muy satisfactorio que la historia haya gustado. Es un personaje muy cercano que gusta a grandes y a chicos. Produce felicidad que el mensaje de educación ambiental se pueda difundir en tantos municipios de Santander”.
La campaña de ‘Vamos a Colorear el Mundo’ se busca institucionalizar en la CDMB para que el legado de Esteban siga trascendiendo más allá del tiempo.