Con un horno de estufa convencional, una batidora y unos cuantos utensilios de cocina, Adriana Gómez es capaz de hacer deliciosas y hermosas tortas, ‘cupcakes’ y postres. Esto gracias a sus manos prodigiosas y a los conocimientos que ha adquirido a lo largo de los años practicando y realizando cursos gratuitos.
Llegó a Bucaramanga en 2016, junto a sus dos hijas y su mascota. Esta es la ciudad natal de su mamá, y por ello tiene algunos familiares aquí. Empezó haciendo labores de limpieza y trabajando en una pizzería, pero en sus tiempos libres preparaba productos como gelatinas, helados y quesillos para luego venderlos.
Hasta que en 2018 decidió empezar de lleno su emprendimiento “Dulce Antojo Pastelería”.
“Recuerdo que cuando empecé tenía una cocinita. El horno era un mechón y la lata estaba rota en uno de los lados. Me tocaba ponerle una colchoneta para que se comprimiera el calor y me aguantara. Ahí hice mi primera torta y los primeros ‘panquecitos’, entonces yo decía: ‘si pude hacer eso, claro que sí se puede’”, recuerda Adriana Gómez.
Una de las cosas que esta emprendedora más agradece de Colombia es el fácil acceso a internet, ya que donde ella vivía en Venezuela había muchas dificultades de conexión. Por ello, no tenía mucho conocimiento del manejo de los celulares, pero, con la ayuda de sus hijas, logró aprender más sobre tecnología, tomar cursos virtuales y mejorar sus habilidades para tomar fotografías y subirlas a redes sociales.
Entre los productos que más vende, están los quesillos, los ‘panquecitos’, las tortas de chocolate, las tortas de zanahoria y el chocoflan. La mayoría de lo que conoce sobre estas preparaciones lo aprendió realizando cursos que, sumados a su cualidad perfeccionista, la han llevado a tener una gran cantidad de clientes que disfrutan y recomiendan sus productos.
“Me sueño, y me visualizo con tener mi propio local, así sea uno pequeño, pero que la gente pruebe mis productos y sepan que son naturales, que no llevan tantos químicos ni cosas adicionales y que son preparaciones deliciosas que se pueden hacer desde la casa, desde su cocina”, concluye la emprendedora venezolana.
