Un águila cola roja ha recibido atención durante cuatro meses en el Centro Antención de Valoración Animal de la Corporación Autónoma Regional para la Defensa de la Meseta de Bucaramanga, Cdmb. Su evolución es positiva y ya se encuentra en una jaula de vuelo realizando movimientos naturales. Contra todo pronóstico muy pronto volverá a volar los cielos en su hábitat natural.
Las águilas cola roja pueden vivir más de 20 años, su cuerpo voluminoso y de alas amplias está diseñado para elevarse sin esfuerzo y tienen una cola de un tono canela rojizo muy llamativo.
Está historia es precisamente la de un águila cola roja recuperada en California por el equipo de la CDMB y trasladada al Centro de Atención y Valoración de Fauna Silvestre, CAV, el 22 de febrero de este año.
“Al momento de la valoración se identifica que el animal tiene una fractura completa de su ala izquierda y se proceden a realizar los métodos diagnósticos y las radiografías” explicó Juan Sebastián Mejía, Médico Veterinario de la CAV.
Es así como inicia su proceso de rehabilitación, el equipo de la CAV le realiza antibioterapia para recuperación de sus tejidos y le suministra analgésicos para que tenga reposo mientras se programa el procedimiento quirúrgico.
“Realizamos la cirugía a través de unos pines intramedulares y el animalito presentó una evolución positiva. Su post quirúrgico fue satisfactorio, siempre estuvo comiendo voluntariamente y en ocasiones se le dio alimentación” señaló Juan Sebastián Mejía, Médico Veterinario de la CAV.
Durante cuatro meses el águila cola roja ha recibido terapias, ha sido un proceso de paciencia y amor ya que las evoluciones de las heridas óseas de estas especies son complejas de recuperar debido a que no poseen una medula ósea.
La buena noticia es que ya está en una jaula de vuelo y empezó a hacer vuelos cortos y movimientos naturales, además, con medicamentos homeopáticos se le regula la inflamación y el dolor en su recuperación óseo muscular.
Muy pronto su ala estará recuperada por completo y volverá a volar muy alto en su hábitat natural y continuará siendo de vital ayuda para los agricultores como controlador de plagas en los cultivos.