Hasta el 1 de febrero se empezarán a expedir los recibos para el pago del impuesto predial de San Gil. Así se informa mediante un cartel pegado en la oficina de recaudo de la Secretaría de Hacienda.
Las demoras en la facturación y por ende en la posibilidad de pagar para solicitar paz y salvos, generan preocupación entre los propietarios que quieren acceder a los subsidios y los empresarios que adelantan la venta de sus predios.
Lilia Flórez, una de las ciudadanas que llegó ayer hasta la oficina de Hacienda, contó que normalmente cada año llegan en los primeros días del año para solicitar la factura y así empezar a recaudar los recursos necesarios antes de que venza el plazo del principal descuento, que en este caso se extiende durante los dos primeros meses del año.
Ahora, con el tiempo corriendo, si el recibo se lo entregan en la primera semana de febrero tendría menos de un mes para reunir el dinero. La expectativa de Flórez es que así como la oficina estuvo cerrada un mes, también decidan ampliar el plazo para el primer descuento.
El no funcionamiento del sistema predial genera mayor afectación entre constructores, personas que están haciendo la venta de su predio y los que están comprando.
Javier Acevedo, uno de los afectados, dijo que sin la posibilidad de expedir el paz y salvo tiene solicitudes de nuevas matrículas de agua ante Acuasan paradas, así como procesos de escrituración en notarías.
La afectación también está impidiendo la expedición de certificaciones de estratificación y nomenclatura, en donde el paz y salvo es un requisito. El efecto colateral aquí es que sin esas certificaciones la Electrificadora de Santander, Essa, no expide la matrícula de servicios eléctricos.
Acevedo además cuestionó que en este momento se vive una contrarreloj por las personas interesadas en comprar vivienda para acceder a los últimos recursos que quedan para los subsidios de vivienda y sin la facturación predial activa es imposible continuar con los trámites de préstamos.
Lina María Durán Villar, secretaria de Hacienda de San Gil, explicó que en este caso la administración municipal no puede hacer nada porque se trata de un retraso en la actualización de las bases de datos del Instituto Geográfico Agustín Codazzi de Santander.
“Nos han manifestado que esperan enviarnos las bases de datos finalizando el mes de enero y una vez las tengamos podremos incorporarlas a nuestro software del predial y hacer la respectiva liquidación”, manifestó Durán.