Las recientes lluvias registradas en el área metropolitana de Bucaramanga prendieron las alarmas de miles de hogares que temen verse afectadas ante posibles inundaciones y deslizamientos de tierra.
Si bien en las últimas semanas se registró una disminución en la cantidad de lluvias, las autoridades locales de gestión del riesgo mantienen su atención en algunos puntos de la ciudad.
Es el caso de las zonas aledañas al río de Oro, donde el afluente estuvo a 20 centímetros de su cota máxima, y del barrio Miramanga (comuna 14), donde se han venido presentando deslizamientos de tierra en los últimos meses, poniendo en riesgo a decenas de habitantes.
En el reporte de ayer, el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales, Ideam, reveló que durante la presente semana habrá un 76 % de probabilidad de lluvias para la capital santandereana y su área metropolitana. Esto a pesar del aumento de las temperaturas que se viene dando en las últimas semanas.
Creciente súbita en el río
Tras el fuerte aguacero de la madrugada de ayer, miles de familias que viven a orillas del río de Oro en Bucaramanga presenciaron la primera creciente de ese afluente en el 2023. Por fortuna, no se registró el desbordamiento del caudal en ninguno de los puntos críticos.
“Nos preocupó mucho. Estamos muy prevenidos, esperamos el desarrollo de las obras de mitigación para esta zona. El año anterior se desbordó tres veces el río”, aseguró Erasmo Ramírez Gutiérrez, líder del barrio José Antonio Galán, ubicado en la zona suroccidental, a un costado del mencionado afluente.
Asimismo, Luis Ernesto Ortega Martínez, coordinador de la Unidad de Gestión del Riesgo en Bucaramanga, señaló que ante el posible aumento del caudal del río ante un nuevo aguacero, se mantiene la vigilancia en el río de Oro por el riesgo que representa para al menos dos mil familias que viven en su cercanía, especialmente en tres puntos de la ciudad.
Se trata, por un lado, de los sectores de José Antonio Galán, El Gallineral, Cinco de Enero y Carlos Pizarro; además, el barrio Puente Nariño en la zona más céntrica; y finalmente, al norte de la ciudad en los puntos de La Playa, La Playita y El Plan.
En Miramanga, el terreno vuelve a ceder
A mediados de octubre del 2022, unos 60 habitantes de Miramanga desalojaron sus viviendas ante el riesgo por los derrumbes presentados en el sector.
Desde entonces, esos movimientos de tierra han continuado, así como la zozobra para quienes ven cómo cede el terreno. Por esta razón, los habitantes del barrio temen por el futuro de esta zona y la vida de las familias ubicadas en la parte alta de la montaña.
“Debido al último aguacero se bajó el talud, se llevó un árbol y afectó una casa. El desprendimiento sigue”, dijo Ana Milena Granados Jaimes, presidenta de la Junta de Acción Comunal de Miramanga, sobre las consecuencias que trajo al sector las lluvias presentadas ayer.
Al respecto, Saharay Rojas Téllez, jefe de Gobernanza de la Alcaldía de Bucaramanga, manifestó que la declaratoria de emergencia de calamidad pública en noviembre de 2022 permitirá adelantar obras en Miramanga de manera más rápida.
En ese sentido, según la funcionaria, en febrero de este año iniciará el proceso de contratación para los estudios y la obra que permitirá “mitigar el riesgo” de deslizamiento. Según los cálculos de la administración local, la inversión para esa obra podría llegar a los $1.800 millones.
Cabe recordar que esta zona de la ciudad ya había registrado deslizamientos de tierra desde el año 2006. Los cuales aceleraron entre los años 2010 y 2011, según explicó en su momento el ingeniero Jaime Suárez Díaz a este medio, quien añadió: “Donde están las casas había un parque infantil que se perdió por los deslizamientos”.
Cinco municipios en alerta
El día de ayer, el Ideam emitió un boletín con el listado de las zonas del país en las que se mantienen vigentes las alertas por deslizamientos de tierra.
Según ese documento, para Santander hay cinco municipios en ‘alerta roja’ por este tipo de situaciones: Bucaramanga, El Playón, Guaca, Málaga y Rionegro.
Fabián Vargas, jefe de la Oficina de Gestión del Riesgo de Santander, explicó que estas condiciones de riesgo obedecen al registro histórico de emergencias presentadas en esos lugares.
Asimismo, el funcionario señaló que el panorama para gran parte del territorio departamental será de altas temperaturas.
“Sin embargo, en la mayoría del departamento se siguen presentando temperaturas altas, a excepción de algunos municipios de la zona sur”, dijo Vargas.