Jesús Gabriel es un recién nacido que abrió sus ojos al mundo el pasado 27 de agosto. Cuando su mamá, Diana Rocío Arenas, asistía a su antepenúltima ecografía de control prenatal, la imagen de una mancha en el cuerpo del pequeño alertó a los médicos.
Tras el chequeo, la mujer fue enviada a la Unidad de Urgencias de una clínica de Floridablanca. Ese mismo día, sobre las 11:45 de la noche, dio a luz. Jesús Gabriel nació a la semana 35 de gestación.
La mujer narró que, dos días después del parto, el niño tuvo que ser remitido a una Unidad de Cuidado Intensivo, UCI, porque los exámenes que se le practicaron arrojaron como resultado una falla cardiaca.
Por su condición, Jesús fue trasladado a la Fundación Cardiovascular de Colombia, FVC, en donde permanece desde hace cerca de dos meses y medio bajo cuidado intensivo.
“Cuando ingresó por primera vez a la UCI, mi hijo requirió oxígeno. En nuestra estadía en la FCV le practicaron una laringomalacia para que pudiera respirar mejor y estamos a la espera de una cirugía para corregir la falla cardiaca”, expresó Arenas Niño.
La madre reconoce que, de no haber sido por los controles prenatales, la vida de su hijo estaría en mayor riesgo. Ella tiene 40 años, es madre primeriza y desde siempre supo que su embarazo era de alto riesgo. “Vivo en la vía entre Piedecuesta y San Gil, y cada mes viajaba a los controles, los exámenes y todo lo que se me pedía por parte del personal médico, al pie de la letra para prever situaciones como esta”, agregó.
Aunque no conoce la fecha en la que le darán ‘de alta’ a su pequeño, asegura que “voy a poner aún más esfuerzo y dedicación de mi parte para sacarlo adelante. Como mamá quiero lo mejor para él”.
Cifras en Santander
De acuerdo a los datos de la Secretaría de Salud de Santander, durante 2021 se registraron 3.084 nacimientos pretérmino de un grupo de 25.219 niños. En lo que va corrido de este año, en total se registran 2.323 prematuros dentro de un grupo de 20.710 nacimientos contabilizados en la región.
En tal sentido, el coordinador de la Unidad de Recién Nacidos de la FCV, Jorge Alvarado, precisó que un bebé prematuro es todo el que nace antes de las 37 semanas de la edad gestacional, y tiene entre tres y siete veces más de riesgo de mortalidad que un niño en condiciones normales.
El neonatólogo indicó que un niño prematuro nace en desventaja porque “pueden suceder cosas tan sencillas como el hecho de que no pueda succionar el alimento, que tenga bajas de azúcar hasta complicaciones como que no sea capaz de respirar o alimentarse por sí mismo”.
El profesional médico dijo que hay múltiples causas para que un niño nazca antes de tiempo: la presión alta en la madre, infecciones durante el embarazo, ruptura prematura de membranas, problemas de placenta, infecciones o patologías de los niños, son de las más frecuentes.
Alvarado Socarrás afirmó que estos niños necesitan un tratamiento especial que incluye “el uso de incubadoras, asistencia respiratorio, apoyo nutricional, manejo de antibióticos para la prevención de infecciones. En esta cadena de apoyo son vitales los médicos y aún más las enfermeras que tienen alta responsabilidad en el éxito de estos casos”. No obstante, se estima que cerca del 90 % de los prematuros sobreviven.
Prevención para la supervivencia
Consultar y ponerse en manos de especialistas es la principal recomendación que dan los profesionales de neonatología de la FCV a una mamá que detecte problemas en su embarazo, que puedan desencadenar en un nacimiento prematuro.
El coordinador de la Unidad de Recién Nacidos de la Institución destacó que “lo ideal es que los niños tengan una unidad de recién nacidos con personal expertos en el manejo de estos bebés. Hay que evitar complicaciones tempranas o tardías porque el problema no sólo se da cuando nacen, sino también durante su desarrollo”.
Otro de los puntos que destacó el médico es el tema educativo, ya que los embarazos en menores de edad o mayores de 35 años pueden terminar en nacimientos pretérmino o que registren complicaciones.
Los especialistas aseguraron que existen técnicas para mantener a los niños en el vientre de las madres por algunas semanas. “El mejor regalo que le puedan dar a un neonatólogo es que un niño crezca en el ambiente uterino. Allí se gana peso, madurez y podemos mantenerlo monitorizado para que pueda nacer con las menores complicaciones”.
En 2021, de acuerdo con estadísticas del Dane, el 10,7 % de los nacidos vivos fueron considerados prematuros. Este indicador supera en 1,2 puntos porcentuales al promedio registrado entre 2015 y 2020.