Luis Eloy Flórez Gutiérrez, su esposa Yudy Esperanza Pimienta Niño y su pequeña hija de cuatro años, fueron tres de las cinco víctimas fatales del accidente de tránsito ocurrido el domingo en la madrugada, en la carretera que comunica a Pamplona con Bucaramanga. Eran oriundos del municipio de Fortul, en Arauca.
Las otras fallecidas fueron identificadas como Xiomara Durán Pérez, de 22 años y Érika Paola Beltrán, de 32.
El siniestro se registró aproximadamente a las 5:00 de la mañana, en el sector del Páramo de Berlín, a la altura del kilómetro 52+430 metros, en el sitio conocido como Arenales. Allí, por causas que son materia de investigación, el vehículo de servicio público se chocó de frente contra un tractocamión que iba rumbo a Cúcuta desde la Costa Atlántica.
Aunque las causas no han sido establecidas, se presume que el que accidente habría ocurrido por una imprudencia por parte del conductor de la buseta Libertadores al invadir el carril contrario, quizá por un microsueño; sin embargo, esta versión no ha sido confirmada.
Según se pudo conocer, todas las víctimas iban sentadas detrás del puesto del conductor por lo que quedaron más expuestas, pues el tractocamión destruyó parte de la cabina por la parte lateral.
El conductor de la buseta, de manera milagrosa se salvó; sin embargo sufrió graves fracturas en las dos piernas.
De acuerdo con la información suministrada, Erika Paola Beltrán era oriunda del municipio de Saravena, Arauca. Al parecer, viajaba hacia la ‘Ciudad Bonita’ porque requería una intervención quirúrgica. Era madre de dos adolescentes de 16 y 12 años.
Se caracterizaba por luchar a diario y sacar sus hijos adelante y por ser una persona amable y tierna.
Regresaba de sus vacaciones
Luego de pasar unas cortas vacaciones en su tierra natal, Arauca, Xiomara Durán Pérez regresaba a Girón, municipio que la acogió junto con su familia hace 14 años aproximadamente.
La joven, quien 18 días antes habría cumplido 22 años, se desempeñaba como estilista y era propietaria de un salón de belleza, ubicado en el barrio La Campiña de Girón. Residía en la vereda Llano Grande con sus padres.
Era la tercera de cuatro hermanos quienes siempre la recordarán como la ‘hermosa Dari’, que amaba todo lo que hacía.
“Era una mujer muy feliz, alegre, tenía muchos amigos que la querían mucho. Tenía una nobleza enorme y un corazón muy bondadoso, se caracterizaba por su sonrisa hermosa y amaba a su familia, amigos y compañeros”, comentó uno de sus allegados.
Agregó que “estaba feliz por los logros realizados en su trabajo y su vida. Una excelente hija, la mejor hermana del mundo, la mejor compañera de trabajo y la mejor novia del universo. Su sonrisa y alegría siempre perdurarán en los corazones de los que la amábamos. Y jamás pero jamás la olvidaremos”.
La tragedia pudo ser peor
De acuerdo con la información recolectada, la reacción rápida del conductor del tractocamión al esquivar la buseta fue la ‘salvación’ de los demás pasajeros, de lo contrario, la tragedia pudo haber sido peor.
Las autoridades continúan la investigación.
