La escuela El Valiente, en Cimitarra, Santander, volvió a inundarse desde el pasado martes debido a las fuertes lluvias que han caído en el departamento, dejando así a los estudiantes sin la posibilidad de recibir clases.
Esta no es la primera vez que el plantel educativo sufre los efectos de los aguaceros, según informan sus profesores.
Reportes de los habitantes de la zona señalan que todavía no se han pronunciado ni las autoridades del orden regional ni departamental.
En las imágenes se observan vías inundadas, mientras que en los salones de clases los escritorios, silla y demás útiles flotan por las altas aguas.
«Es una situación difícil. Estamos sin clases. La decepción es efectiva cada día más», dijo una de las profesoras de esta escuela.