Cuatro peticiones, con resultados, fue el pedido que le hizo en su posesión el gobernador de Santander, Mauricio Aguilar, al coronel José James Roa, nuevo comandante de Policía en Bucaramanga.
“Hay que quitar ese miedo que le roba la tranquilidad a nuestros habitantes de Bucaramanga y el área metropolitana”, le dijo el gobernador al coronel frente al tema de transformar la visión de seguridad con enfoque de protección de la vida y en erradicar el crimen organizado.
“La seguridad es un hecho metropolitano y de Santander”, dijo el alcalde de Bucaramanga, Juan Carlos Cárdenas, en referencia al trabajo que se debe desarrollar en conjunto para combatir el delito.
Según cifras entregadas en el último foro ‘Hablemos de Seguridad Ciudadana’, en Bucaramanga la reducción del homicidio, a la fecha, es del 14%. Ahora lo que buscan los mandatarios es seguir trabajando de la mano para combatir el hurto, uno de los delitos que más afecta a la ciudadanía.
Piques ilegales
Otro de los pedidos del gobernador es acabar con los ‘piques’ y recorridos ilegales de las motocicletas.
“Tenemos que trabajar con esa ilegalidad que se efectúan los jueves en la noche o a veces cambian de día, que perturban la tranquilidad de los habitantes y el caos en la ciudad”, comentó Aguilar.
Según las autoridades, estos recorridos son frecuentes en las carreras 33, 27 y 15, Ciudadela Real de Minas, autopista a Floridablanca y el Anillo Vial de Girón.
Convenio con Tránsito
A su vez le solicitó “revivir los convenios entre Policía y las direcciones de Tránsito”, para que en conjunto ejerzan autoridad en los sitios donde se quiere violar la ley por parte de algunos motorizados que no respetan las normas viales y así tener acción judicial frente a quienes incumplen las normas.
Trabajar en comunidad
“Quiero que trabajemos de la mano con los presidentes de Juntas de Acción Comunal y con los líderes sociales, para que conjuntamente se dé la lucha contra los grupos al servicio del microtráfico, que están acabando con la juventud en la venta de estupefacientes”, dijo Mauricio Aguilar.
Según Roa, los continuos golpes a las estructuras que delinquen en el área metropolitana, y el aumento de pie de fuerza en los sitios neurálgicos, han permitido reducir los delitos.
“El trabajo articulado, basado en la escucha a líderes comunitarios y toda una oferta institucional al servicio de la seguridad ayuda a todos a seguir por ese mismo camino”, dijo el comandante.
Finalmente, el trabajo con el Ejército será importante en la lucha para acabar con los traficantes de drogas en el departamento.