El coronel Benjamín Núñez, detenido por ser el principal sospechoso del asesinato de tres jóvenes capturados en Sucre, se declaró inocente de los cargos en la audiencia de control de garantías, aunque anunció que está dispuesto a negociar posteriormente un preacuerdo de culpabilidad con la Fiscalía.
En la misma diligencia, realizada en la mañana de este sábado, un juez legalizó la captura de quien fuera el comandante Operativo de la Policía de Sucre.
El ente acusador le imputó cargos por homicidio agravado, privación ilegal de la libertad, y ocultamiento o destrucción de elementos materiales de prueba, los cuales Núñez rechazó en el estrado.
El procesado le pidió al juez aplazar la audiencia para mañana, pues declaró que no se siente “en condiciones para continuar”, porque completa 30 horas sin dormir.
En cuanto a la imputación, la Fiscalía manifestó que los tres jóvenes de Chochó, Sucre, fueron retenidos, golpeados y asesinados por el coronel y varios uniformados de la Policía Nacional, con el ánimo de castigarlos al relacionarlos, sin fundamento alguno, con la muerte de un patrullero.
Las víctimas fueron Carlos Ibáñez, Jesús David Díaz y José Carlos Arévalo Contreras, a quienes acribillaron a tiros en el volco de una camioneta oficial.
En la audiencia se conoció que el coronel Benjamín Núñez salió de Colombia el pasado 4 de agosto y este viernes 9 de septiembre se presentó de manera libre en el consulado de Colombia en ciudad de México, con el fin de responder al proceso judicial que ordenó su captura desde el pasado 16 de agosto.
Núñez fue capturado a las 8:46 de la mañana de este sábado, una vez arribó a Migración Colombia en el aeropuerto El Dorado, luego de llegar en un vuelo comercial procedente de México.
El pasado 8 de septiembre servidores del CTI de la Fiscalía trasladaron al búnker a los otros seis patrulleros vinculados a la investigación, quienes se encontraban en la ciudad de Sincelejo (Sucre). Posteriormente fueron llevados a la cárcel Picota de Bogotá, donde se encuentran recluidos.