El pasado 5 de marzo se registró en Girón un brutal ataque contra un menor de 17 años. Fue acuchillado por dos ladrones que querían robarle su bolso.
El hecho violento ocurrió diez días después de la muerte de Nickol Valentina, la menor de 15 años que fue apuñalada por robarle su celular en Bucaramanga.
La ciudad estaba conmocionada por los aberrantes casos. La fugaz vida de Nickol se ‘apagó’ y el jovencito de 17-que a su edad ya era un destacado deportista- estuvo debatiéndose un largo tiempo en la Clínica Ardilla Lülle.
Los criminales, dos hermanos identificados como Jhojan Fabián Rueda Gualdrón y Víctor Yesid Rueda Gualdrón, le clavaron un puñal en la espalda que le atravesó el estómago. Robarle sus pertenencias avaluadas en casi $2 millones casi le cuesta la vida y su futuro en el deporte de taekwondo.
Justamente el día que lo asaltaron se dirigía a la casa de un compañero donde los recogerían para llevarlos a Aguachica donde tenían un campeonato de artes marciales.
Ese sábado, a las 4:00 de la madrugada, el joven caminaba por la calle 30 con carrera 19 del barrio Santa Cruz cuando fue sorprendido por los salvajes.
“A él le dieron para matarlo, porque la puñalada le alcanzó a cortar el estómago. Ayer lo metieron al quirófano y ya está en recuperación. Él llevaba el bolso con los uniformes de tres compañeros más, el celular y sus implementos para el arte marcial. Eran como más de 500 mil pesos”, manifestó la abuela del joven.
El menor tomó fuerzas y caminó agonizante hasta su destino. Allí su compañero, impactado por lo ocurrido, lo trasladó de inmediato hasta el Hospital de Girón, donde le brindaron los primeros auxilios.
Una vez las autoridades lograron la identificación plena de los agresores, el rostro de los hermanos Gualdrón figuró en el cartel de los más buscados por la Policía Metropolitana de Bucaramanga, publicado en el mes de mayo.
Seis meses después del brutal ataque uno de los Gualdrón fue capturado. A Jhojan Fabián lo detuvieron unos uniformados de la Policía para un requisa, sin saber que era tremenda ‘joya’.
La captura de Jhojan
Esta semana, en medio de labores de patrullaje que realizaban los agentes en el barrio San Francisco de Bucaramanga, para mala suerte de Jhojan, le pidieron que les entregara su documento de identidad para verificar sus antecedentes.
Gualdrón sabía que si consultaban su documento lo esposarían de inmediato. Su reacción fue salir corriendo para evadir a los policías.
Pero no logró llegar muy lejos, lo capturaron. Cuando lo trasladaron a la Estación de Policía del Norte para su identificación plena, el sistema biómetrico mostró que tenía una orden judicial vigente por los delitos de tentativa de homicidio y hurto agravado.
Según informaron las autoridades, Jhojan era un actor criminal recurrente. Desde el 2018 registra anotaciones judiciales por lesiones personales, porte ilegal de armas de fuego y tráfico de estupefacientes.
Ahora pagará por el violento ataque contra el menor de 17 años, falta que su hermano Víctor también sea capturado.
